Nonagésimo cuarto día de entrenamiento. He vuelto a tener una de esas noches "locas" de insomnio; con lo que no sé como saldrá la entrada de hoy. Porque pese a no haber dormido casi nada (creo que me dormía a eso de las 2:30), en cuanto ha sonado la alarma esta mañana he pegado el bote de la cama, y en menos de veinte minutos ya estaba corriendo.
El insomnio, mi gran enemigo en el entrenamiento que estoy llevando. Yo creía que lo tenía vencido este tema; llevaba dos semanas durmiendo pacíficamente hasta anoche, que mi cabeza volvió a hacer de las mías. Evidentemente cuando me he despertado y he empezado a correr tenía un run run tremendo. No sé no quiero ni autoexigirme, ni obsesionarme; pero esa parte de mi que tantas malas jugadas me hace vuelve a surgir y me pone la maratón a todas horas, pensando en el entrenamiento de mañana, de pasado, de la semana que viene. En parte tengo ganas que ya pase para desconectar un poco, volver a correr a mi aire; que es eso lo que debería hacer pero mi subconsciente me hace esas malas pasadas y tarde o temprano vuelve a surgir. Suerte que no soy un deportista de élite, que si no ya ni viviría.
Como he dicho antes creo que hoy he batido el récord desde que me ha sonado la alarma hasta que me he echado a correr (no todo iba a ser malo). Pero claro, hoy ha sido un entrenamiento yo diría raro. La primera mitad tenía la cabeza como un bombo con los coros y el run run, vamos una comida de cabeza tremenda, hasta el punto que me he tenido que pegar una voz yo mismo para poner un poco de calma. La segunda mitad parecía que ya iba bien la cosa, pero hoy no podía ser mi día, y si el insomnio no ha podido con mi fuerza de voluntad; lo que sí que me ha vencido porque cuando da, da, han sido los retortijones. Ahí sí que se pasas mal. Menos mal, que por "suerte" me ha dado cuando estaba ya acabando y he podido aguantar como he podido. Pero los estiramientos me ha tocado hacerlos en casa después de haber hecho una buena evacuación.
Mañana descanso, a ver si así se me calma un poquito la cabeza y dejo de pensar tanto en los entrenamientos y demás.
Día: 94
El insomnio, mi gran enemigo en el entrenamiento que estoy llevando. Yo creía que lo tenía vencido este tema; llevaba dos semanas durmiendo pacíficamente hasta anoche, que mi cabeza volvió a hacer de las mías. Evidentemente cuando me he despertado y he empezado a correr tenía un run run tremendo. No sé no quiero ni autoexigirme, ni obsesionarme; pero esa parte de mi que tantas malas jugadas me hace vuelve a surgir y me pone la maratón a todas horas, pensando en el entrenamiento de mañana, de pasado, de la semana que viene. En parte tengo ganas que ya pase para desconectar un poco, volver a correr a mi aire; que es eso lo que debería hacer pero mi subconsciente me hace esas malas pasadas y tarde o temprano vuelve a surgir. Suerte que no soy un deportista de élite, que si no ya ni viviría.
Como he dicho antes creo que hoy he batido el récord desde que me ha sonado la alarma hasta que me he echado a correr (no todo iba a ser malo). Pero claro, hoy ha sido un entrenamiento yo diría raro. La primera mitad tenía la cabeza como un bombo con los coros y el run run, vamos una comida de cabeza tremenda, hasta el punto que me he tenido que pegar una voz yo mismo para poner un poco de calma. La segunda mitad parecía que ya iba bien la cosa, pero hoy no podía ser mi día, y si el insomnio no ha podido con mi fuerza de voluntad; lo que sí que me ha vencido porque cuando da, da, han sido los retortijones. Ahí sí que se pasas mal. Menos mal, que por "suerte" me ha dado cuando estaba ya acabando y he podido aguantar como he podido. Pero los estiramientos me ha tocado hacerlos en casa después de haber hecho una buena evacuación.
Mañana descanso, a ver si así se me calma un poquito la cabeza y dejo de pensar tanto en los entrenamientos y demás.
Día: 94
Distancia recorrida: 13 Km.
Distancia acumulada: 610,3 Km.
No hay comentarios:
Publicar un comentario