Nonagésimo séptimo día de entrenamiento. Efectivamente, se ha notado el cansancio de correr ayer por la tarde y hoy hacer 16 kilómetros. Pero ahí he estado dando el callo, como tiene que ser. Aunque he de decir que esta mañana tenía muy pocas ganas de ponerme a correr; el sueño podía conmigo. Así como ayer cuando estaba escribiendo la entrada iba medio dormido ya, pues esta mañana aún seguía con el sueño. Por suerte al ser sábado podía salir a correr ya que no tenía ninguna presión luego para ir a trabajar. Con lo que cuando me ha sonado la alarma he preferido seguir durmiendo un poquillo más, hasta que a las 8 me he decidido salir a la calle.
Cuando he salido a la calle, enseguida he notado que iba a ser un entrenamiento pesado. Aún llevaba el cansancio de los 8 kilómetros de ayer tarde; claro sólo he descansado las piernas catorce horas. Si hubiese corrido ayer 5 Km. no creo que hubiese pasado gran cosa, pero ayer fueron 8, y hoy tenía que correr el doble. Además como no estaba muy inspirado he decidido ir por el parque de al lado de casa y alrededores. Pero claro, como he dicho antes, enseguida he notado que iba a ser un entrenamiento bastante pesado. Llevaba dos vueltas hechas (casi 4 kilómetros) y notaba que no iba motivado y me estaba agobiando. Vamos, que si seguía así no tardaría mucho en acabar el entrenamiento.
Como quería hacer el entrenamiento entero, después de llevar 6 kilómetros hechos he decidido dejar de dar vueltas por el parque y alrededor, y me he ido a dar una vuelta de 10 kilómetros bajando por el barrio de Gornal hasta la Gran Vía, luego coger la Gran Vía hasta plaza Espanya y volver por la carretera de la Bordeta y calle Santa Eulàlia hasta casa. De esta manera no tenía más remedio que hacer todo el recorrido, ya que no llevaba ni tarjeta de metro ni dinero para comprar una tarjeta.
El primer tramo, mientras iba por Gornal se me ha hecho muy pesado, pero he tenido una conversación conmigo mismo para no volverme atrás y he seguido por suerte para adelante. Gracias a eso me he empezado a animar, he ido cogiendo un buen ritmo, he empezado a disfrutar y a tirar millas.
He de decir que la mentalidad hace muchísimo. El running no es solo correr y ya está; bueno si es poca distancia sí, pero ya para medio fondo y fondo sí que es muy importante la mentalidad. Hay que estar trabajando todo el entrenamiento con la mente, no decaer, darse mensajes de ánimo uno mismo y una cosa que a mi me va muy bien. Nunca ir pensando "aún me quedan tantos kilómetros para acabar". Ese tipo de mentalidad, al menos en mi caso, no es nada buena porque hace que la cosa se ponga muy cuesta arriba. En cambio una mentalidad tipo "esto ya está hecho", "vamos que queda nada, puedo dar más aún" hace que uno se crezca y hasta que pueda aumentar el ritmo. Pero bueno, como siempre digo esto es desde mi punto de vista, luego cada uno tiene su propio pensamiento, mentalidad y maneras de correr.
Mañana ya acabaré la semana 14, y sólo me faltarán seis semanas, un mes y medio solamente. La verdad es que no se me está haciendo pesado, eso sí, estoy pasando por unos cuantos estados de ánimo. Creo que mañana aprovecharé para hacer un pequeño balance de estas catorce semanas. Pero como siempre digo, eso lo contaré mañana. Por hoy ya basta.
Día: 97
Cuando he salido a la calle, enseguida he notado que iba a ser un entrenamiento pesado. Aún llevaba el cansancio de los 8 kilómetros de ayer tarde; claro sólo he descansado las piernas catorce horas. Si hubiese corrido ayer 5 Km. no creo que hubiese pasado gran cosa, pero ayer fueron 8, y hoy tenía que correr el doble. Además como no estaba muy inspirado he decidido ir por el parque de al lado de casa y alrededores. Pero claro, como he dicho antes, enseguida he notado que iba a ser un entrenamiento bastante pesado. Llevaba dos vueltas hechas (casi 4 kilómetros) y notaba que no iba motivado y me estaba agobiando. Vamos, que si seguía así no tardaría mucho en acabar el entrenamiento.
Como quería hacer el entrenamiento entero, después de llevar 6 kilómetros hechos he decidido dejar de dar vueltas por el parque y alrededor, y me he ido a dar una vuelta de 10 kilómetros bajando por el barrio de Gornal hasta la Gran Vía, luego coger la Gran Vía hasta plaza Espanya y volver por la carretera de la Bordeta y calle Santa Eulàlia hasta casa. De esta manera no tenía más remedio que hacer todo el recorrido, ya que no llevaba ni tarjeta de metro ni dinero para comprar una tarjeta.
El primer tramo, mientras iba por Gornal se me ha hecho muy pesado, pero he tenido una conversación conmigo mismo para no volverme atrás y he seguido por suerte para adelante. Gracias a eso me he empezado a animar, he ido cogiendo un buen ritmo, he empezado a disfrutar y a tirar millas.
He de decir que la mentalidad hace muchísimo. El running no es solo correr y ya está; bueno si es poca distancia sí, pero ya para medio fondo y fondo sí que es muy importante la mentalidad. Hay que estar trabajando todo el entrenamiento con la mente, no decaer, darse mensajes de ánimo uno mismo y una cosa que a mi me va muy bien. Nunca ir pensando "aún me quedan tantos kilómetros para acabar". Ese tipo de mentalidad, al menos en mi caso, no es nada buena porque hace que la cosa se ponga muy cuesta arriba. En cambio una mentalidad tipo "esto ya está hecho", "vamos que queda nada, puedo dar más aún" hace que uno se crezca y hasta que pueda aumentar el ritmo. Pero bueno, como siempre digo esto es desde mi punto de vista, luego cada uno tiene su propio pensamiento, mentalidad y maneras de correr.
Mañana ya acabaré la semana 14, y sólo me faltarán seis semanas, un mes y medio solamente. La verdad es que no se me está haciendo pesado, eso sí, estoy pasando por unos cuantos estados de ánimo. Creo que mañana aprovecharé para hacer un pequeño balance de estas catorce semanas. Pero como siempre digo, eso lo contaré mañana. Por hoy ya basta.
Día: 97
Distancia recorrida: 16 Km.
Distancia acumulada: 634,3 Km.
No hay comentarios:
Publicar un comentario