Centésimo vigésimo segundo día de entrenamiento. Hoy realmente no sé que contar. Es que tantos días teniendo que explicar alguna cosilla pues como que va costando; y más aún cuando se van acercando los últimos días de entrenamiento. No sé si será porque esto ya se acaba o qué, pero que va costando. A lo mejor si en lugar de tener que estar entrenando durante 140 días, fuesen 200 días, puede que ahora no estuviese tan cansado. Bueno cansado físicamente no mucho, me refiero más a cansado mentalmente. Donde correr lo estoy haciendo ya como una rutina, vamos como si fuese ir al trabajo; que es algo que hay que hacerlo todos los días.
Es que analizándolo bien, he pasado ya por muchos estados de ánimo. Y por este que estoy pasando, noto como si me faltase un empujoncito o un chispazo para acabarme de animar. Algo parecido ya me pasó el día de la media, que hubo un tramo como que estaba en babia, vamos que corría por correr, porque no me quedaba otra, me notaba como aislado (también el llevar la música a todo trapo hace un poco de aislamiento). Hasta que me metí en la carrera de nuevo. Pues así es como me voy sintiendo estos días. Necesito un "punch" para meterme en el entrenamiento y en la carrera en 18 días.
Hoy, a muy duras penas, me he conseguido levantar a los dos minutos de sonar la alarma. Lo que me ha costado, y eso que anoche me iba petadísimo a la cama a las 9:30 de la noche. Pero a veces cuanto más duermo luego más me cuesta levantarme. Y eso que antes de que me sonase la alarma ya estaba más o menos atento. No sé si será ya porque el cuerpo está acostumbrado pero muchas veces antes que suene la alarma estoy medio despierto. Eso sí, suena la alarma y me entra de nuevo el sueño. Paradojas de la vida.
Centrándome en el entrenamiento de hoy, puedo decir que he hecho un poco el "burro". En los tramos que tenía subidas le he apretado, mientras que en los tramos de bajada he ido mucho más relajado. Esto no es que me lo haya contado que lo haga nadie, pero creo que es una buena manera de fortalecer las piernas y luego el día clave ir más suelto. También hoy he tenido la pega otra vez del viento, que cada vez que venía una racha tocaba un poco las narices; pero me voy a tener que ir acostumbrando porque ya se sabe que en Marzo, por norma general, suele ser un mes ventoso.
También ya se empieza a notar que no hace tanto frío y amanece antes; porque se van viendo runners que han acabado el proceso de hivernación, han desempolvado las mallas y las zapatillas y se han puesto a correr. Se agradece que se vea movimiento de runners por el parque, porque a veces pienso que soy el único rarito saliendo a correr a las 6 de la mañana.
Mañana toca descansar y dormir un poco más, o en su defecto perrear en la cama, cosa que agradezco bastante; porque últimamente el sueño puede conmigo.
Día: 122
Es que analizándolo bien, he pasado ya por muchos estados de ánimo. Y por este que estoy pasando, noto como si me faltase un empujoncito o un chispazo para acabarme de animar. Algo parecido ya me pasó el día de la media, que hubo un tramo como que estaba en babia, vamos que corría por correr, porque no me quedaba otra, me notaba como aislado (también el llevar la música a todo trapo hace un poco de aislamiento). Hasta que me metí en la carrera de nuevo. Pues así es como me voy sintiendo estos días. Necesito un "punch" para meterme en el entrenamiento y en la carrera en 18 días.
Hoy, a muy duras penas, me he conseguido levantar a los dos minutos de sonar la alarma. Lo que me ha costado, y eso que anoche me iba petadísimo a la cama a las 9:30 de la noche. Pero a veces cuanto más duermo luego más me cuesta levantarme. Y eso que antes de que me sonase la alarma ya estaba más o menos atento. No sé si será ya porque el cuerpo está acostumbrado pero muchas veces antes que suene la alarma estoy medio despierto. Eso sí, suena la alarma y me entra de nuevo el sueño. Paradojas de la vida.
Centrándome en el entrenamiento de hoy, puedo decir que he hecho un poco el "burro". En los tramos que tenía subidas le he apretado, mientras que en los tramos de bajada he ido mucho más relajado. Esto no es que me lo haya contado que lo haga nadie, pero creo que es una buena manera de fortalecer las piernas y luego el día clave ir más suelto. También hoy he tenido la pega otra vez del viento, que cada vez que venía una racha tocaba un poco las narices; pero me voy a tener que ir acostumbrando porque ya se sabe que en Marzo, por norma general, suele ser un mes ventoso.
También ya se empieza a notar que no hace tanto frío y amanece antes; porque se van viendo runners que han acabado el proceso de hivernación, han desempolvado las mallas y las zapatillas y se han puesto a correr. Se agradece que se vea movimiento de runners por el parque, porque a veces pienso que soy el único rarito saliendo a correr a las 6 de la mañana.
Mañana toca descansar y dormir un poco más, o en su defecto perrear en la cama, cosa que agradezco bastante; porque últimamente el sueño puede conmigo.
Día: 122
Distancia recorrida: 13 Km.
Distancia acumulada: 813,197 Km.
Saludos y a dejarse llevar por las piernas.
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