viernes, 30 de octubre de 2015

Día 110... 5 Kilómetros.

Cenésimo décimo día de entrenamiento. Hoy es un día que realmente no sé que decir, estoy totalmente sin ideas, porque ha sido un entrenamiento de lo más normal y corriente, tranquilo, nada pesado; además que ya correr 5 kilómetros es como no hacer prácticamente nada; pero para no quedarse sin hacer nada mejor hacer al menos los 5000 metros. El lunes, hice uno más con las series y acabé petado. Es que llevar un ritmo u otro hace mucho, porque por ejemplo sabiendo que mañana he de hacer 21 kilómetros pues tampoco podía meter un ritmo de estos fuertes, pero tampoco puedo dormirme en los laureles. En cambio si mañana no hubiese tenido que hacer ninguna distancia entonces sí que hubiese intentado llevar un ritmo más o menos fuerte. Es más cuando acabe la maratón y esté corriendo por correr ya intentaré algún día ir a tope a ver hasta cuanto aguanto. Si algún día quiero bajar de los 45 minutos los 10 kilómetros tendré que empezar a probarme. Pero esa meta aún la tengo muy lejos, como a tres minutos de distancia. En cambio para 5 kilómetros sí que puedo conseguir llevar el ritmo ideal; pero es lo que digo siempre, llevando ese ritmo puedo aguantar 6 o como mucho 7 kilómetros; y ya digo yo que el desfondamiento llega de golpe y como de lo que cuesta luego seguir, tal y como me pasó en la cursa dels Bombers del 2014, que hice muy bien los 5 primeros kilómetros, pero luego cai, y lo que llegué a sufrir para acabar.

Dejando casos hipotéticos a parte, como hoy venía corriendo al trabajo, tampoco es que me haya costado mucho levantarme; podía darme de margen hasta las 7 de la mañana, así que me lo he podido tomar con calma. Aunque de la primera alarma ni me he enterado, ha sido gracias a la segunda alarma cuando me he levantado, pero eso sí, hoy con la calma, no tenía prisa alguna. Es que hay que ver, cuando no se tiene ninguna prisa todo va mucho más rodado, se hace todo más fácil, además que las prisas nunca fueron buenas. Por eso para el día 29 de noviembre me lo voy a tomar con toda la calma del mundo y lo que tarde pues tardaré. ¿Que tardo más que en la maratón de Barcelona? Pues no pasa absolutamente nada porque habré hecho la maratón de San Sebastián y punto, y la habré hecho disfrutando, que es lo que importa. Que en cambio tardo menos, pues perfecto. Lo importante es acabar, y acabar bien, no arrastrándome por el suelo. Sólo espero que los últimos 5 kilómetros de la maratón sean igual que los de la de Barcelona, que se hicieron solos.

Del entrenamiento de hoy tampoco puedo decir gran cosa, ya que como he dicho antes hacer 5 kilómetros no me cuesta nada hacerlos, y quizás sí, hoy hasta llegar a plaza España me ha costado un poquillo, pero eso era el calentamiento previo, y siempre los dos o tres primeros kilómetros me cuesta engancharme. Pero luego ya pongo velocidad de crucero y a hacer kilómetros; porque cuando ya acababa me empezaba a encontrar bastante a gusto; así que mañana seguro que disfrutaré con el entrenamiento.

Mañana me toca hacer una media maratón, lo que aún no sé es por donde ire, tengo que idearme un buen recorrido, pero eso sí, iré a pasármelo bien que es lo que cuenta, además que esta distancia es una de mis favoritas. He hecho tres media maratones y quiero seguir haciendo unas cuantas más. El año que viene la de Granollers al final me la perderé, pero a la semana siguiente es la de Barcelona, así que después de la maratón ya tengo excusa para no parar, jeje.

Día: 110
Distancia recorrida: 5 Km.
Distancia acumulada: 661.1 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.


jueves, 29 de octubre de 2015

Día 109... Descanso

Centésimo noveno día de entrenamiento. Primer día de descanso que aprovecho para escribir alguna cosilla. A falta de un mes exacto para la gran cita quiero aprovechar para analizar un poco el recorrido de la maratón. Se me hace un poco raro escribir un día en el que no he tenido que correr, porque no puedo decir lo que me ha costado levantarme, o como me encontraba cuando me he echado a correr.

Lo que sí que puedo decir claramente es que a veces alucino con mi cuerpo. Ayer por ejemplo, por la mañana, estaba que casi ni me podía mover de lo cansado y agotado que me encontraba, y ya hasta estaba temiendo que tenía agujetas. Pues ayer por la noche estaba la mar de bien, sólo con las piernas un poco cansadas pero ya está. Y esta mañana me encontraba como si nada, aunque el descanso lo agradezco como agua de mayo, tal y como comentaba ayer.

Aprovechando que hoy falta un mes exacto quiero hacerme un pequeño homenaje a mi mismo con un pequeño montaje que hizo mi sobrino de la maratón de Barcelona, que cada vez que lo veo me sigo emocionando, porque lo pienso y fue mucho esfuerzo, mucha dedicación, mucha fuerza de voluntad y muchos kilómetros recorridos... eso sí, fue un momento único y sobretodo ver la meta y saber que uno ha conseguido su objetivo después de cuatro meses y medio de duro entrenamiento. Así que aquí tenéis este pequeño gran montaje que hizo el crack de mi sobrino.


Después de este vídeo, también quiero aprovechar, ya que falta un mes exacto para la maratón donostiarra para hacer un pequeño análisis del recorrido. A ver que hace como 11 años que no voy por San Sebastián pero más o menos me puedo hacer una idea del recorrido, sobretodo la zona del paseo de la Contxa, porque quien no ha estado en San Sebastian y no ha ido por dicho paseo para acabar en el casco viejo comiendo unos pintxos con un buen vino de hombres, jeje.

La capital Guipuzkoana no es sea muy grande en extensión, así que el recorrido más o menos está diseñado como para dar dos vueltas, y así compartir la primera vuelta con todos los atletas que han decidido hacer la media maratón. Por suerte han evitado pasar la maratón por las zonas montañosas de Donosti, porque si hiciesen subir al monte Igueldo, Urgull o Ulía ya me habían visto suficiente.


El recorrido no es que tenga mucho secreto, se rodea la ría, se pasa por donde hacen el festival de cine, por la estación de tren y se tira hacia las afueras, donde se da media vuelta y se vuelve a pasar otra vez por la ría, se hace la intención de ir al casco viejo, pero en realidad es dar la vuelta para ir hacia el paseo de la Contxa (lo más famoso de San Sebastián); se hace todo el paseo, que yo recuerdo haberlo hecho caminando y es un buen trozo, pero corriendo ha de ser una pasada hacerlo. Una vez se deja el mítico paseo se va rodeando más o menos el pie del monte Igueldo hasta llegar a las afueras de Donosti, se da la vuelta y se hace el mismo recorrido a la inversa; sólo que poco antes de llegar a la ría ya se empieza a bajar hasta el estadio de Anoeta. Cuando se entra en el estadio de la Real Sociedad, los atletas de la media maratón habrán acabado, mientras que los "valientes" tenemos que volver a dar otra vuelta por el mismo recorrido, así hasta finalizar los 42,195 kilómetros otra vez en el estadio de Anoeta con los brazos en alto y pudiendo decir tranquilamente que he vuelto a acabar otra maratón.

La verdad es que tengo unas ganas locas que llegue el momento, hacer un viaje en tren, provar la gastronomía, visitar la ciudad, con mi chándal... no sé, voy a ser un atleta (aunque tarde más de 4 horas pero soy atleta) que va a otra ciudad a correr. Se empieza por esto, y quien dice que no acabe corriendo algún día la maratón de Nueva York, la más famosa del mundo. Hay tiempo para todo; y si no es la neoyorkina puede ser la de Berlín (hoy por hoy donde es el recorrido más rápido, allí está establecido el record del mundo). Porque Berlín también ha de ser bonito visitarlo, probar la cerveza y las salchichas, diga lo que diga la OMS.

En fin, que ya sólo queda un mes y estoy en la recta final a tope de motivación, y más visto la rápida recuperación que he tenido del entrenamiento de ayer. Así que mañana y para no perder la costumbre de los viernes, y si no hay nada que me lo impida vendré al trabajo corriendo para hacer los cinco kilómetros de rigor.

Día: 109
Distancia recorrida: 0 Km.
Distancia acumulada: 656.1 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.

miércoles, 28 de octubre de 2015

Día 108... 16 Kilómetros.

Centésimo octavo día de entrenamiento. Lo que me ha costado hoy hacer los 16 kilómetros, ya cuando iba por la Gran Vía en dirección a Montjuic me he empezado a dar cuenta que me costaría un pelín hacer hoy el entrenamiento, pero me he dicho que después de la ascensión al Estadi Olímpic, vendría la bajada y recuperaría, pero no ha sido así. Con lo que me ha costado un poco hoy. No sé si es debido a que tendría que haber descansado más después de los entrenamientos de lunes y martes, o porque hoy era uno de esos días tontunos, en los que el cuerpo no responde como debería responder. Sólo espero que el 29 de Noviembre esté a tope. Es que hoy estoy tan cansado que ni me apetece escribir la entrada del blog, jeje. Pero bueno, ya que estoy, al menos cuatro líneas escribiré contando un poquillo el entrenamiento de hoy.

Por suerte no me ha costado levantarme hoy, sólo que he tenido una pequeña urgencia de evacuación, que me ha hecho perder bastante tiempo; pero aunque tuviese que correr 16 kilómetros, tampoco me he alterado mucho, he ido a la mia. Es que prefiero estarme un buen rato en el servicio hasta que salga el tema, que no me entre un apretón por ahí como ya me pasó este pasado verano que tuve que hacer alguna parada técnica. La cuestión es que a las 6:20 salía a correr, así que por lo menos hasta las 8 de la mañana no llegaría a casa; pero bueno, las prisas no son buenas y he ido a mi ritmo.

Como bien dije ayer, no tenía muy claro que ruta hacer, así que como soy un masoca he decidido subir hasta el Estadio Olímpico de Montjuic para así fortalecer las piernas y que cuando corra en llano porder darlo todo. Por lo demás, meterme por unas calles u otras para así completar los 16 kilómetros correspondientes.

Cuando he empezado a correr, me he dado cuenta que hoy sería un entrenamiento duro. Eso cuando ya se tiene un poco de experiencia corriendo uno lo sabe enseguida si será buen o mal entrenamiento. Sé cuando cuestan los primeros kilómetros o cuando lo voy a pasar mal. Y normal, si el lunes corrí por la tarde/noche 11 kilómetros y el martes por la mañana (unas 10 horas de diferencia) me hice cuatro series de 1500 metros, normal que acabe así. El cuerpo me pedía un poco más de descanso; además ayer con la tontería que llovía me subí enseguida a casa para meterme en la ducha, y los estiramientos como que se me pasaron por alto. Y así cuando he comenzado a correr aún me notaba las piernas bastante cargadas, pues normal que me costase. Pero yo siendo como soy de autoexigente he hecho el recorrido completo habiéndolo podido acortar; eso sí, suerte que no llevaba tarjeta de metro, porque si la llego a llevar a la que llego a plaza España me meto en los Ferrocarriles y para casa. Es la "ventaja" que tiene no llevar una tarjeta de metro encima, que sí o sí tienes que acabar el entrenamiento, o a unas malas acortarlo; pero no he querido, el sábado ya me salté un entrenamiento muy importante en la preparación y no quiero saltarme más cosas. Así que a partir de ahora, intentaré dar todo lo que pueda de mi, porque ya falta nada y menos.

Mañana día de descanso y bien merecido, para mi será como agua de mayo. Aunque depende como incluso me da por escribir una entradica; ya que mañana es 29 de Octubre y faltará justo un mes para la ansiada maratón de Donosti.

Día: 108
Distancia recorrida: 16 Km.
Distancia acumulada: 656.1 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.

martes, 27 de octubre de 2015

Días 106 y 107... 11 Km. y Series 4x1500 m.

Centésimo sexto y centésimo séptimo día de entrenamiento. Hay veces que el cuerpo pide descanso, y si además le añadimos el cambio estacional y todo el rollo de cambio de hora y demás, la cosa se agraba. Eso fue lo que me pasó más o menos el viernes y el sábado, aunque todo viene del jueves por la noche. Resulta que el jueves después de comer me empezó a doler la cabeza bastante; me tomé un analgésico pero ni aún así se me calmaba (he de decir que a mi los cambios de estación, cambios de hora y cambios de tiempo me afectan mucho). En fin, que esa noche me fui pronto a la cama para ver si durmiendo se me calmaba el dichoso dolor de cabeza; pero ni durmiendo se me pudo calmar, vamos que no había manera de descansar. Así que a las 4:30 me fui al médico, porque en mi no es normal que me dure tanto una jaqueca. Una vez en el médico me pincharon voltarén y me metieron en un box para que se me calmase el dichoso malestar; por suerte así fue. Con lo que entre una cosa y otra llegaba a casa a las 6:30 de la mañana. Aún podía ir al trabajo corriendo, pero tal y como tenía el cuerpo y que iba medio atontado, pues como que lo dejé estar.

El sábado me conseguí levantar pronto y desayunar, pero el cuerpo lo tenía cansadísimo y tenía muchísimo sueño. No sé si era porque había dormido poco (el viernes por la noche tuve actuación teatral y me fui tarde a la cama); o si aún quedaba por mi cuerpo algún resto del calmante que me pincharon; o simplemente porque iba muy agotado pero mi cuerpo no estaba preparado para salir a correr; así que cuando estaba a punto para vestirme decidí volver a meterme en la cama... y evidentemente iba agotado porque dormí cuatro horas más. Con lo que ni viernes ni sábado salí a correr; pero de vez en cuando hay que darle un descanso al cuerpo, y lo bueno que tiene cuando ya se llevan tantos días de entrenamiento es que uno mismo sabe cuando puede y cuando no puede salir a correr.

Después de viernes, sábado y domingo descansando, ayer comencé mi decimosexta semana de entrenamiento con ganas... bueno, eso de empezarla con ganas es un decir, porque para variar por la mañana no había manera de conseguir salir de la cama, parecía que me habían puesto un imán o me habían pegado con pegamento extrafuerte. Así que en lugar de correr por la mañana decidí salir a correr por la tarde después de trabajar, aún sabiendo que esta mañana iba a salir a correr. Así que el entrenamiento de ayer lo he hecho hoy; y hoy he hecho lo que tenía que haber hecho ayer. Vamos, que como sé que las series me dejan agotado (y más si tenía que hacer cuatro series de 1500 metros), pues he decidido dejar las series para esta mañana y así tener 24 horas para recuperarme y no 10. Con lo que ayer hice 11 kilómetros y hoy las series. Que hoy, por suerte, me he conseguido levantar bien, y salir a una hora muy buena; y hasta luego he podido ducharme con toda la calma del mundo y desayunar tranquilamente; lo que no conseguí ayer lo he conseguido hoy. También he de decir que hoy me he conseguido levantar gracias a mi perrilla, que se ha olido que ya estaba medio despierto y ha ido ahí a mi lado a darme los buenos días, jeje.

Tal y como he dicho antes, por motivos estrictamente físicos decidí invertir los días de entrenamiento; así que ayer me puse a correr 11 kilómetros, lo malo era que no tenía ganas de ponerme a dar un montón de vueltas al parque, como tampoco me apetecía adentrarme por las calles de Hospitalet y Barcelona, ya que a esas horas el tráfico está horrible y tendría que estar parándome y rompiendo el ritmo cada dos por tres por culpa de los semáforos. Así que me ideé un circuito de unos 3,7 kilómetros (para dar tres vueltas) en donde únicamente tenía que cruzar un paso de peatones sin semáforo y otro paso de peatones con semáforo, con lo que la probabilidad de tenerme que parar era mínima (tuve la suerte que no me tuve que parar en ningún momento). La primera vuelta, he de decir que se me hizo algo pesada, pero nada del otro mundo; a la que me hice con el recorrido como otro entrenamiento normal y corriente llevando un ritmo suave y tranquilo, sabiendo que como mucho tendría 10 horas para recuperarme y además hoy tocaban series. Con lo que me lo tomé con calma; y aunque parezca raro en mi los últimos metros hasta los hice ya frenándome.

En cambio hoy la cosa cambiaba, hoy series, con lo que a mi me gustan y además series de las largas, cuatro de 1500 metros; me estaba imaginando a Fermín Cacho ganando cuatro veces seguidas el oro de Barcelona '92. Evidentemente no ha sido así, yo diría que ha sido algo más agotador. A ver, que sé que van muy bien las series por el tema cardíaco y demás, pero a mi no me gustan nada, yo siempre he dicho que soy el Carlos Sastre del running, que voy a mi ritmo y que nadie me lo cambie; pero si tengo que hacer series, que le haremos, por suerte, las de hoy eran las últimas series de la preparación. Ya no tendré que hacer series hasta que me vuelva a preparar otra carrera.

Hoy hace exactamente un año que comenzaba mi preparación para la maratón de Barcelona, algo que veía tan lejano, pensar 140 días de entrenamiento, cuatro meses y medio; pero poco a poco, con empeño y con ganas se consiguió, lo mismo que de aquí a un mes más o menos conseguiré hacer la maratón donostiarra, aunque el sábado no pudiese correr los 38 kilómetros (que ya los correré la semana que viene). Eso sí, para celebrar el aniversario, que mejor que hacer un entrenamiento con lluvia, y no precisamente lluvia finita, no, sino lluvia de esta que encharca el suelo y uno acaba chorreando, que hasta he tenido que dejar la gorra en el lavamanos porque goteaba y todo. Pero bueno, como siempre he dicho, para mi la lluvia no es un impedimento, mientras no me incomode a la hora de correr y no me resbale. Eso sí cuando paro de correr es cuando me doy cuenta que estoy como las sopas.

Mañana, por raro que parezca no me tocan 13 kilómetros, pero sí 16. Así que aún ni sé que ruta me diseñaré. No sé si hacer la de siempre y dar tres vueltas por el parque o ampliarla. Ya veré lo que hago, pero evidentemente algo se me ocurrirá.

Día: 106
Distancia recorrida: 11 Km.
Distancia acumulada: 634.1 Km.

Día: 107
Distancia recorrida: 6 Km.
Distancia acumulada: 640.1 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.

 

jueves, 22 de octubre de 2015

Día 102... 13 Kilómetros

Centésimo segundo día de entrenamieto. Hoy sí que he conseguido despertarme a una hora decente para así poder hacer tranquilamente los 13 kilómetros. Porque dudaba si corría ayer por la noche o esta mañana; pero cuando llegué anoche a casa no tenía nada de ganas de ponerme a correr. He de decir que cuanto más cerca veo el día, más ganas tengo de acabar la preparación; tengo muchísimas ganas de hacer la maratón, pero ya podría ser este fin de semana. Me puede encantar correr, pero unos cuantos días de descanso me van haciendo falta. Pero bueno, en 38 días la cosa está lista y cuando menos cuenta me de, estaré ahí dándolo todo por las calles de San Sebastián. Aunque más que ganas he de decir que en la cama se está muy bien, y más ahora que empiezan a venir los días de frío; porque esta mañana menuda rasca pegaba en la calle, un termómetro que he visto marcaba 11 grados. Así que creo que voy a tener que ir pensando ya en la camiseta térmica y en las sudaderas; porque hoy hasta que no he comenzado a subir la avenida Can Serra no he entrado en calor; vamos a los dos kilómetros más o menos. Luego sí, pero el comienzo cuesta.

Como acabo de decir, esta mañana no me ha costado nada levantarme y podría haber salido a una hora muy buena, pero cuando ya estaba listo para salir he tenido un pequeño aviso de evacuación y he preferido ser prudente. Al final, no he podido hacer nada, y me he ido un poco temeroso por si tenía uno de esos momentos como los que tuve por Ossó de Sió y por Linares (no voy a entrar en detalles). Al final, igualmente, he conseguido salir a una hora decente. También, cuando he llegado a casa no he ido con prisa. He hecho los estiramientos con la calma; como siempre digo, para los entrenamientos hay que dedicarle su tiempo para así evitar disgustos innecesarios por culpa de no haber hecho un estiramiento bien hecho. Por eso, con el entrenamiento se puede tardar más o menos, pero con los estiramientos hay que dedicarle su tiempo, que lo suyo sería dedicarle entre 10 y 20 minutos.

Cuando he empezado a correr, dejando en frío a parte, porque eso es algo inevitable, cuando he empezado a correr me he encontrado bastante bien, aunque iba con pocas ganas de correr hoy. Eso de correr unos días por la mañana y otros por la tarde descuadra un poco; y por eso, suerte que estaba corriendo cómodo, que sino a la hora de pasasr por al lado de casa hubiese plegado. Aunque esta vez, lo que creía que se me iba a hacer pesado se me ha pasado en un momento de nada. Y eso que cuando iba bajando por el puete de la Vaguard me estaba diciedo "buff, aún tengo que ir por Gornal y hacer toda la Gran Vía". Pero esta vez ha pasado en un momento. Es curioso, que hay días en los que la cosa se pasa en un momento y otros días que cuesta. Pero todo es cuestión de la mente; si uno ya va pensando que le va a costar y demás, lo acabará pasando mal... pero si se va todo el rato con la mentalidad positiva la cosa cambia totalmente. Y sino que me lo digan a mi hace un par de semanas cuando conseguí hacer los 35 kilómetros; y el este sábado cumpliré los 38 kilómetros para así cumplir como dios manda las tiradas largas de esta preparación. Pues eso, a la que he pisado territorio de Santa Eulália mi mentalidad ha cambiado por completo y hasta creo que he acelerado el ritmo.

Mañana, siendo viernes y teniendo que correr sólo 5 kilómetros y para no perder la costumbre ire al trabajo corriendo; y como digo siempre así podré matar dos pájaros de un tiro. Eso sí, al ser una distancia, ya para mi insignificante tendré que ir con cuidado con el ritmo que lleve para así poder darlo todo el sábado y poder decir que estoy ya a un paso de volver a ser maratoniano, jeje.

Día: 102
Distancia recorrida: 13 Km.
Distancia acumulada: 623.1 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.

miércoles, 21 de octubre de 2015

Día 100... 10 Kilómetros.

Centésimo día de entrenamiento. Ya he llegado a los cien días de entrenamiento, y como si nada. Estos tres meses y diez días se me han pasado prácticamente volando; quizás quitando los días que he tenido que hacer tiradas largas, que se me ha hecho un poquillo más pesado. Lo que no consigo llevar bien es el tema del sueño; no sé si es porque le doy menos importancia, vamos que no es tan fundamental hacer todos los entrenamientos, o bien porque como ya he hecho una maratón sé por donde puedo tirar, o donde puedo darme algún "respiro" cuando me haga falta. Por ejemplo, en la preparación de la anterior maratón, ya en las últimas semanas, los lunes no hice ni una sola tirada y andaba preocupado porque no sabría si rendiría, o bien el día que tenía que hacer 42 kilómetros y me quedé en la maratón ¿pasó algo?, pues no, hice la maratón y disfrutándola, a mi ritmo. Por eso si fallo algún día, o si otro me quedo a falta de tres o cuatro kilómetros no me voy a alterar porque sé que voy a conseguirlo, mejor o peor, pero lo conseguiré.

Hoy por ejemplo tendría que haber corrido los 13 kilómetros de todos los miércoles, pero habiendo hecho ayer por la tarde/noche 10 kilómetros, realmente, no me veía con ánimo de ponerme a correr; así que haré como hice hace un par de semanas, salir a correr el jueves por la mañana, y hoy dedicar el día a descanso. Es que es lo que comentaba ayer, hago alguna cosa que se salga de la rutina habitual y ya voy cansado todo el día, me suena la alarma y sigo metido en la cama... suerte que ya sólo queda un mes y diez días de madrugones, que eso se pasa volado. Hoy estoy hablando como si fuese realmente el entrenamiento de hoy... cuando la entrada de hoy está dedicada al entrenamiento que hice ayer por la tarde/noche; pero me pasa lo de siempre, que me pongo a hablar de todo me nos de lo que realmente tengo que hablar. Pero es como he comentado en alguna entrada anterior, que a veces este blog es más para explicar mis sensaciones, como estoy viviendo la preparación y demás, que no el entrenamiento diario; porque, para ser sincero, a medida que el cuerpo está más que habituado a estos entrenamientos, que no cuesta nada hacer dichos entrenamientos.

Ayer, me tocó correr 10 kilómetros, y la verdad, es que alucino, porque es que no me cuesta nada hacer estas distancias cortas; no me canso, no tengo agujetas y se me pasa volando. Normal que se me pase volando, si el otro día estuve tres horas y media corriendo y sin ir escuchando música; que el no escuchar música también forma parte de mi entrenamiento para así trabajar la mente y estar en todo momento positivo total, para así en el día clave entre el ambiente, la gente, estar en Donosti, correr por la Concha, entrar en Anoeta hacerlo dándolo todo y escuchando música cañera de grupos como Queen, Helloween, Iron Maiden, AC/DC, Guns and Roses, Obús, Ángeles del Infierno, Extremoduro... vamos un estilo rock duro, o heavy metal. Aunque como siempre digo cada uno tiene su estilo y se motiva con la música que más le guste, porque seguro que habrá quien le motive la música clásica, el house, el dance o el reggeton. Lo importante es estar bien motivado para así poder disfrutar al 100% de la maratón, que disfrutando es una pasada. Por eso, correr sin compañía, por sitios monótonos, sin música ya es parte del entrenamiento; porque cuando llegas a la cursa dices "Ostias, que pasada" y eso da un subidón de adrenalina tremendo. Ya tenía razón mi primo cuando me dijo en su día que cambia totalmente el estar entrenándose al llegar a la cursa; y lo pude corroborar el 15 de marzo de 2015.

Mañana si consigo de una vez por todas despertarme bien y salir a correr a una hora decente, podré hacer los famosos 13 kilómetros, por el recorrido de siempre. Vamos la rutina, por eso mismo acabo hablando prácticamente de cualquier cosa excepto del entrenamiento en cuestión.

Día: 100
Distancia recorrida: 10 Km.
Distancia acumulada: 610.1 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.

martes, 20 de octubre de 2015

Día 99... Series 6x800.

Nonagésimo noveno día de entrenamiento. Después de dos días de descanso ayer no tuve narices a despertarme a una hora decente para salir a correr, lo mismo que me ha pasado esta mañana. Tengo tanto sueño, y estoy tan bien en la cama que no me apetece salir de ahí. Pero eso no quiere decir que no saliese a correr ayer. Salí, y lo hice por la tarde cuando vine de trabajar, lo mismo que haré esta tarde cuando llegue a casa. Me pondré el mono de trabajo y a correr un ratico durante 10 kilómetros; sólo que hoy a las horas a las que saldré a correr no me quedará otra que ponerme a dar vueltas por el parque, vamos, algo de lo más entretenido y divertido; pero bueno, a veces va bien hacer algo monótono y repetitivo para así cuando llegue el momento clave poder darlo todo. A lo que iba, parece ser que cuando hago algo fuera de la rutina luego me cuesta muchísimo despertarme. Como ya dije, este pasado fin de semana estuve fuera, de ahí a lo de los dos días de descanso; que suerte que me hice un buen planteamiento la semana pasada y los deberes del sábado los hice el viernes, porque donde estuve el fin de semana había muchísimas pendientes y mucho lío de calles, así que me habría desorientado fijo; luego, también vi que en una de las calles o caminos por los que me tendría que haber metido en una supuesta ruta que me diseñé era camino privado y no se podía pasar... así que por una vez tomé la decisión acertada. Tal como iba diciendo, al tener dos días de descanso y estando fuera pues uno aprovecha para trasnochar un poco más al estar en familia y todo eso. Claro, eso luego pasa factura y tanto ayer como hoy no ha habido quien me despertase a la hora correcta, así que me tocó y me tocará correr por la tarde.

Ahora, hablando del entrenamiento, que poco me gustan las series, acabo muy petado, pero es necesario que las haga para ir cogiendo fondo; y he de reconocer que cada vez me cuesta menos hacer las dichositas series. Por suerte las de ayer fueron ya las penúltimas series. Eso sí, las series que me quedan son las peores 4 de 1500 metros. Y a estas de 800 metros ya les había cogido el truco, hasta había encontrado el ritmo bueno y sabía como planteármelas; lo suyo es ir fuerte pero suave, vamos algo así como un sí, pero no; o un más pero menos. También he de decir que a la quinta serie ya iba algo fatigado. Aunque en la segunda serie le metí caña; con lo que a la tercera tuve que aflojar un poco el ritmo; la cuarta y la quinta las hice normalitas (ritmo de serie) y la última quizás es la que hice más despacio, pero como nunca llevo cronómetro ni miro el tiempo que tardo; lo único que hago es pegar el tirón y ya llegaré. Es como el tiempo de descanso, lo calculo mentalmente, pero ayer ni lo contaba, hacía los 800 metros y los 200 metros restantes los hacía caminando y continuaba con la siguiente serie; porque todo es un poco relativo. A veces puede ser que uno necesite menos tiempo de recuperación de lo que dice el plan de entrenamiento, y otras, en cambio hace falta más tiempo de recuperación; porque alguna vez me ha pasado ambos casos, es mejor descansar de más, que no empezar una serie sin estar recuperado del todo o al menos listo para seguir al ataque.

Normalmente con las series, la primera es la que más cuesta; aún uno está frío, no sabe que ritmo tomar, y eso que ya se viene con un calentamiento previo de unos cinco o diez minutos. Yo, en mi caso, suelo hacer un kilómetro al trote cochinero para calentar las piernas y luego comenzar la primera serie; y aún así cansa más y se hace más pesada. También por norma general (siempre hablando de mi caso), la segunda serie es la que menos me cuesta hacer, ya he entrado en calor, sé más o menos que ritmo he de llevar y no voy cansado; a partir de ahí es cuando a medida que se va haciendo una serie nueva el cansancio va haciendo mella. Hasta que al final uno ya acaba extasiado y con los estiramientos aún lo estoy pasando mal debido al sobreesfuerzo que se hace. Aunque como el primer día que hice las series de 1500 metros (en Linares) no recuerdo haberlo pasado tan mal. Es que estuve todo el día de bajón, que no había manera de tirar hacia adelante. Fueron sólo tres series, pero que mal lo pasé al acabar.

Esta tarde la cosa será mucho más tranquila, algo ya habitual hacer los 10 kilómetros y además a mi ritmo, con lo que cuando menos cuenta me de eso ya estará hecho. Eso sí, como he dicho al principio de esta entrada, debido a que a las 19:30-20:00 hay bastante tráfico me pondré a dar vueltas por el parque; eso sí, haré el recorrido de 1.9 Km., no tengo ganas de hacer lo de hace un par de semanas de dar diez vueltas al circuito de 1 kilómetro.

Día: 99
Distancia recorrida: 4.8 Km.
Distancia acumulada: 600.1 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.


viernes, 16 de octubre de 2015

Día 96... 16 Kilómetros.

Nonagésimo sexto día de entrenamiento. Se acabó la décimo cuarta semana de entrenamiento. Ya sólo me queda un mes y medio para el gran momento, un mes y medio para decir que corro maratones; porque como bien dice mi primo, ahora sólo puedo decir que he corrido una maratón; pero el 29 de noviembre a eso de las 13:30-14:00 ya podré decir que corro maratones, porque ya habré corrido dos maratones, y al ser plural ya puedo decir eso, que corro maratones.

Hoy también he cumplido el reto de correr cuatro días seguidos, y además creo que lo he superado con nota. Así que ahora ya me toca descansar hasta el lunes, poder pasar un fin de semana tranquilo en compañía de la familia, respirando aire puro del Montseny, y si no llueve pues hasta puedo permitirme el ir a buscar castañas; vamos, pegarme un fin de semana como dios manda y pudiendo dormir hasta una hora en la que ya haya salido el sol, porque últimamente cuando salgo a correr aún es de noche, y muchas de las veces cuando acabo aún sigue siendo de noche, pero bueno, estoy ya acostumbrado, y me gusta porque además hay poca gente; cuanta menos gente, más a gusto se corre, porque sino ya hay que ir esquivando a unos y a otros, y eso es un poco pesado.

Yo creía que me iba a costar más de la cuenta hacer los 16 kilómetros, ayer me picaban un poco las piernas y hoy cuarto día seguido corriendo y además una distancia buena. De eso me he dado cuenta cuando he comenzado a correr que se me ha hecho un poco pesado el principio; iba por la plaza Cerdà y se me estaba haciendo un mundo, no quería ni pensar que aún tenía que subir a Montjuic, y después de bajar Montjuic venía un tramo de ligera subida hasta la plaza Francesc Macià. Así que no me quedaba otra que armarme de paciencia. Es que es curioso, ayer no me costó nada hacer el entrenamiento y se me pasó volando; en cambio hoy lo pesado que se me ha hecho ese tramo, bueno, se me ha hecho pesado llegar hasta plaza España. En cambio ha sido comenzar a subir Montjuic y toda esa pesadez me ha desaparecido y he comenzado a pasármelo bien; vamos que me ha empezado a pasar como cuando voy en bici, que estoy esperando como loco la subida. Y no sé si es que ya llevo un buen entrenamiento o que, pero no me ha costado nada subir hasta el estadio olímpico; cuando yo siempre he recordado que en la cursa del Corte Inglés me costaba muchísimo hacer esa subida; así que no la recordaba tan suave. Más bien creo, que como ya llevo unos cuantos kilómetros a mis espaldas y me he metido por subidas (hace unas semanas por ejemplo subí hasta la carretera de les Aigües) pues mis piernas ya no lo sufren tanto. A partir de ahí, después de la subida, tocaba la bajada, con lo que ha sido en ese momento cuando mejor me lo he pasado, me encontraba perfectamente, satisfecho de haber conseguido hacer una buena subida. Tampoco me he querido envalar mucho para que al llegar a la zona llana (más bien dicho ligera subida) me pegase el golpe. Si puede ser hay que intentar mantener siempre el mismo ritmo tanto en la subida como en la bajada; evidentemente en la subida el ritmo se ralentiza y en la baja inconscientemente se acelera, pero para hacer un buen entrenamiento lo suyo es intentar mantener en la medida de lo posible el ritmo. Con lo que hasta la plaza Francesc Macià que volvía a picar un pelín la subida lo he hecho bastante bien, vamos el típico tramo de transición. Y al igual que el día que corrí los 13 kilómetros, el tramo de la avenida Diagonal y luego hasta el trabajo ha sido ya cuando me he crecido y me he permitido apretar un poco más el ritmo. Me encontraba bien y las piernas me respondían, pues adelante; además ahora tendré dos días de descanso, pues más motivo aún para poder acelerar el ritmo (también hay que decir que el tramo de Avenida Diagonal que he hecho es ligeramente bajada), pero bueno, también me merecía una bajadita.

Como he dicho antes, hasta el lunes ya me olvido de correr; además el lunes tengo las temidas series. Tal y como hice la semana pasada, el lunes me vuelven a tocar seis series de ochocientos metros. Que aunque parezca poca distancia, entre que caliento primero hago las series, camino durante el descanso y demás; tranquilamente me voy a ir a los siete kilómetros. A ver que tal va y si no me agoto enseguida. Pero por ahora me toca descansar que me lo he ganado en esta semana rara en cuanto a los días de entrenamiento.

Día: 96
Distancia recorrida: 16 Km.
Distancia acumulada: 595.3 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.

jueves, 15 de octubre de 2015

Día 95... 8 Kilómetros.

Nonagésimo quinto día de entrenamiento. Hay días que uno se estaría en la cama, y más aún cuando empieza ya a hacer frío y en la cama se está de maravilla; pues como no, eso me ha pasado hoy, estaba muy bien en mi camita, tenía sueño y no me apetecía nada ponerme a correr; pero como siempre dentro de mi tengo al demoniete que me exige más y más para llegar a estar en forma el próximo 29 de noviembre. Pues toda esa falta de ganas en cuanto me he puesto a correr se me han ido, no sé si sería por el frío o porqué pero a la que me he puesto a correr me he encontrado de maravilla, con sueño pero teniendo buenas sensaciones. Hasta estoy por decir que el entrenamiento de hoy se me ha hecho muy corto. Para mi correr menos de 10 kilómetros, llevando ya el entrenamiento que llevo, es nada y menos.

Hoy, para variar, me ha costado salir de la cama. Me ha sonado la alarma, y cuando he mirado el reloj sólo habían pasado cinco minutos; así que ya me he ido mentalizando que me tenía que despertar. Pues que va, me ha tenido que sonar la segunda alarma... y hasta más o menos las 6:40 no me he ido a correr. Vamos que hoy ha sido más de una hora estando ahí sin hacer nada y perdiendo el tiempo; sólo espero que mañana no me pase eso. Como el martes ya estuve dando vueltas al parque, hoy... bueno ayer por la tarde, decidí hacerme una rutilla por Hospitalet y tocando algo de Barcelona. Así que me he ido por avenida Carrilet hasta Barcelona, la plaza Cerdà; de allí he tirado por gran Vía hasta Gornal, atravesar todo gornal y volver hacia el parque de siempre para hacer los últimos metros. Cuando me he querido dar cuenta estaba en el Gran Vía 2. Y esta vez sí que me lo he tomado con calma, bueno calma relativa, más bien ir a un ritmo suave porque mañana tengo que correr el doble de lo que he corrido hoy; también llevo tres días seguidos corriendo, en teoría al cuarto día debería descansar y mañana no va a ser así; con lo que más me valía no envalarme, vamos la dosificación de la que estoy hablando siempre. Siendo un entrenamiento más vale guardarse un poco porque al día siguiente hay que volver a salir a correr y no tengo ganas de estar arrastrándome por el suelo. Pero bueno, que en general ha sido un entrenamiento relativamente rápido (o he tenido la sensación que se me ha pasado volando). El único punto por el que no me ha hecho mucha gracia pasar ha sido para acceder al parque. Al parque se puede acceder desde la zona por la que vivo yo (que es el barrio de San José) donde las entradas son normales y corrientes a pie de calle. En cambio si se quiere acceder por el lado de Santa Eulalia, para no pasar por el puente de la Vanguard hay un paso subterraneo que va a parar a la explanada del parque. Pues pasar por ahí no me ha hecho mucha gracia, bueno es que a mi nunca me ha gustado ir por los pasos subterraneos; pero por cambiar un poco la rutina del entrenamiento he decidido meterme por ahí, además eran pocos metros.

Esta mañana se ha notado ya el frío, y me ha tocado buscar por casa la braga para tener un poco protegido el cuello; y menos mal que la he conseguido encontrar, porque me ha costado bastante entrar en calor, y hasta he echado un poco de menos un poco más de ropa como una sudadera o un cortavientos. De lo que sí que me he dado cuenta es que casi ni he sudado; así que para mi ya está llegando el buen tiempo para entrenar. Quien iría a decir que hace tres meses era horrible salir a correr incluso a las 21:30 que todavía pegaba un bochorno terrible, que salía de la ducha y seguía sudando. Yo me he dado cuenta que corro mejor con el frío, me pongo mis cuatro capas de ropa y mis guantes y a hacer kilómetros. Luego duchita y ya no se suda más; que ahora con este tiempo se empezará a ver quien es el auténtico runner y quien no. El auténtico runner es el que sale a correr haga el tiempo que haga; y luego están los "robocops fosforitos" que a la que baje un poco la temperatura ya se quedan en casa sin salir a correr. Me hubiese gustado verlos el día de la media maratón de Barcelona, madre mía, hasta que no empezó la cursa el frío que llegué a pasar; pero a la que se empieza a correr se corre de maravilla y se agradece, y si se tiene calor pues se remanga uno y ya está. Pero correr con calor es inhumano; aunque para mantenerse en forma hay que apechugar, pero es lo que hay. Si pudiese elegir un sitio donde correr en verano sería en el interior, como ya hice estando de vacaciones, porque el bochorno es nulo, y sí, se suda, pero cuando se acaba de correr se deja de sudar.

Mañana cuarto día seguido de entrenamiento para poder pegarme un fin de semana relajadito, por suerte me toca media distancia, así que si consigo despertarme en cuanto me suene la alarma y en menos de media hora estar listo, me ire al trabajo corriendo para hacer tranquilamente los 16 kilómetros. Además como soy un masoca, mi intención mañana es dar una vueltecita hasta el estadio olímpico de Montjuic; vamos que me espera una subidita de unos tres kilómetros. Así me refuerzo bien las piernas. Con lo que espero no acabar muy petado para poderlo contar con garantías.

Día: 95
Distancia recorrida: 8 Km.
Distancia acumulada: 579.3 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.


miércoles, 14 de octubre de 2015

Día 94... 13 Kilómetros.

Nonagésimo cuarto día de entrenamiento. ¿Qué cuento hoy? Porque resulta que hoy estoy poco inspirado en ideas; y más habiendo sido un entrenamiento de lo más normal del mundo. Es que cuando uno lleva noventa y cuatro días de entrenamiento, ya no sabe que poner de novedoso, a parte de si me ha costado o no levantarme, de como me van las nuevas zapatillas, o si me he cansado mucho o poco, de un recorrido o de otro. Vamos que todas las entradas vienen a ser casi iguales. Pero bueno, ya a estas alturas no voy a dejar de escribir el blog. Quizás si me vuelvo a preparar para otra maratón no creo que me ponga a escribir todos los días (ahora digo esto y luego vuelvo a caer); lo mismo dije cuando acabé la maratón de Barcelona que no iba a correr otra maratón porque el entrenamiento era muy duro; y en cambio en un año voy a correr dos maratones, aunque he de decir que esta preparación me está costando mucho menos que la anterior, no sé si será porque como ya tengo el cuerpo habituado no me ha costado tanto adaptarme. Aunque he de decir que los primeros días de esta preparación fueron realmente duros, pensaba que se iba a acabar el mundo y sólo llevaba tres kilómetros hechos; pero es que correr en julio y agosto es muy duro con ese bochorno que hace, pareciendo que la cabeza me iba a estallar.

El recorrido que tengo diseñado para los miércoles lo puedo dividir en tres etapas, ya que todas las veces que lo he hecho me ha pasado exactamente lo mismo. La primera etapa del recorrido viene a ser el principio, evidentemente siempre me cuesta arracar y coger el ritmo, y más aún que ya están empezando a bajar un poco las temperaturas, además a partir del primer kilómetro va picando un poco la subida hasta llegar a avenida Can Serra, que ahí sí que es subida pura y dura; por suerte luego viene una bajada. Pues todo ese trozo hasta que llego casi a los límites de Hospitalet es el trozo que se me hace más pesado. Luego viene una segunda etapa que es la transición, que transcurre desde los límites de Hospitalet, pasar por el ayuntamiento, por al lado de casa y darle una vuelta al parque. Este tramo viene siendo algo así como "no llevo casi nada hecho y aún me queda". En la media distancia viene a ser así, hay un momento en que parece que uno corre sin sentido de un lado a otro; es decir hacer kilómetros por hacerlos. Luego ya viene la última etapa, que es la mejor, cuando el cuerpo ya está habituado y es la recta final, que hasta el tramo de avenida Vilanova del Gornal ya ni se me hace pesada. En este último tramo me salen las fuerzas de no sé donde y lo hago con muchas ganas y a tope. Pues todo esto me ha ido pasando estos miércoles que tenía que hacer 13 kilómetros; así que veo que el miércoles que viene experimentaré lo mismo. Con lo que cuando vea que me cuesta arrancar y que para qué me he levantado, ya sabré que es lo más normal del mundo. Suerte que conozco mi cuerpo y sé que luego a la que arranca va de maravilla; pero si no lo conociese más de una vez habría acabado el entrenamiento mucho antes de lo que me tocaba. Es curioso, pero uno en seguida comienza a conocer su cuerpo, sabe sus límites, cuando ha de decir basta, y como administrarse bien una carrera. Aunque aún hay gente que no conoce su cuerpo y tiene algún susto; por eso siempre digo que hay que conocerse bien, que cada uno vaya a su ritmo y que todo necesita una buena preparación y mucha dedicación para poder conseguir los objetivos propuestos. No hay que pretender acabar una maratón preparándose en una semana; lo mismo digo una maratón que alguien que no corre hacer 10 kilómetros de golpe. Eso me pasaba a mi al principio de correr la cursa del Corte Inglés, no me preparaba nada, llegaba el día, me costaba mil demonios hacerla y luego estaba una semana sin poderme mover por las agujetas. En cambio ahora hace mucho que no sé lo que son unas agujetas producidas por correr. Cuando acabé la maratón, estaba echo polvo, pero al día siguiente me podía mover tranquilamente y sin problemas.

Al final parece que sin estar inspirado he comentado algunas cosillas. Mañana es jueves, y como dije ayer no me tomaré el día de descanso, sino que haré los 8 kilómetros y el viernes 16 Km., porque ya que estoy el fin de semana fuera lo hago todo ahora y así no tengo que hacer los deberes por ahí y me puedo dedicar a descansar y perrear. Lo que no sé es que hacer mañana, si ponerme a dar vueltas por el parque o buscarme alguna rutilla. Eso entre esta tarde y esta noche lo decidiré y mañana lo contaré.

Día: 94
Distancia recorrida: 13 Km.
Distancia acumulada: 571.3 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.

martes, 13 de octubre de 2015

Día 93... 8 Kilómetros.

Nonagésimo tercer día de entrenamiento. Ya va quedando menos para el gran día, menos de dos meses, es más, cuando acabe esta semana ya sólo me quedará un mes y medio de preparación. Y las ganas que tengo que llegue ese gran momento, pero por todo; por visitar la ciuad de Donostia, comerme unos cuantos pintxos; y también por poder correr por el paseo de la Concha, entrar en Anoeta, pasar por al lado del Kursal (donde se celebra el festival de cine); y sobretodo saber que sensaciones tengo al correr mi segunda maratón. Yo creo que con un buen clima, mis zapatillas, el ambiente y el avituallamiento la podré completar sin problemas. Ahora creo que estoy en esa etapa en la que tengo ganas que llegue el momento clave. Estas trece primeras semanas de entrenamiento se me han pasado volando, nada pesado, cumpliendo, teniendo alguna mala noche solamente; vamos que podría ser como práctica habitual para mantenerme en forma; que esta vez si que no voy a dejarme cuando acabe la maratón, más que nada porque el 31 de diciembre es la famosa cursa dels Nassos, luego a primeros o mediados de Enero hay otra cursa que aún no he hecho, que es la Sant Antoni (también de 10 kilómetros); y el 14 de febrero es la media maratón de Barcelona; con lo que no puedo dormirme mucho en los laureles.

Ayer, tal y como dije el domingo, decidí tomarme el día de descanso, aunque si hubiese querido podría haber salido a correr porque me encontraba bastante bien de fuerzas, pero por prudencia también preferí tomarme el día de descanso, que así el cuerpo descansa para luego poder rendir mejor. Además que esta semana va a ser un poco rara en cuanto al entrenamiento. Este fin de semana voy a estar fuera; y esta vez no voy a hacer como otras veces de allá donde voy irme a correr, más que nada porque creo que donde voy hay bastantes pendientes. Así que esta semana correré seguido de martes a viernes, para así luego tomarme sábado y domingo de descanso para disfrutar de mi estancia rural. Claro, el sábado, por suerte, no me tocaría hacer una tirada larga, sinó que me tocaría hacer 16 kilómetros; con lo que el viernes me haré una buena ruta para ir al trabajo corriendo y hacer la distancia correspondiente. Eso sí, el viernes ya puedo hacer algo para a las 6:00 estar corriendo por las calles de Hospitalet camino a Barcelona. Lo mismo que mañana, que al ser miércoles, me toca hacer 13 kilómetros y los quiero hacer con la tranquilidad para llegar luego a casa y poderme duchar y desayunar sin prisas. Así que en cuanto suene la alarma tendré que pegar un bote y ponerme manos a la obra. Porque esta mañana me ha sonado la alarma, pero al anoche costarme un poquito dormirme; aún no sé porque tuve una noche medio loca, pues esta mañana me ha sonado la alarma y he tardado como media hora en salir de la cama, y otra media hora más en ponerme a correr. Pero bueno, los días que tengo que correr poco puedo permitirme estos vagueos por la cama.

Cuando he conseguido ponerme a correr, aún dudaba que recorrido hacer; pero como ni me había mirado ninguna rutilla he decidido ponerme a dar vueltas por el parque, pero el recorrido largo (el de 1.9 Km). No sé si sería por el sueño, que cuando he salido a correr aún tenía los ojos medio cerrados y la pompa en la nariz, pero el comienzo me ha costado bastante coger el ritmo, sobretodo cuando he encarado la primera subida, lo que me ha costado hacerla. Por suerte después de la primera vuelta ya he entrado en calor y como un día más; comparándolo con el sábado cualquier distancia es corta y se hace como nada; al igual que en el último tramo ya es inconsciente pero subo el ritmo y acabo bastante fuerte, eso quiere decir que ya tengo un buen fondo hecho. De ahí a que tenga tantas ganas que llegue la cita maratoniana. Después del subidón del sábado, ahora que me echen cualquier cosa, porqué ahora me veo capaz de hacer la maratón. Sólo son siete kilómetros más de los que hice el sábado; y como comentaba al principio, entre el ambiente y el avituallamiento se hará todo más llevadero. Pero bueno, quedan algo más de seis semanas de preparación; así que tendré que seguir preparándome para que se me haga más fácil; aunque bajar de las cuatro horas lo veo muy difícil, prefiero ir a mi ritmo y disfrutar, que no ir pasado de ritmo y desfondarme en el 30.

Tal y como he dicho antes, mañana me toca hacer 13 kilómetros; por cuarta semana seguida toca hacer esta distancia, que tanto en esta preparación como en la anterior me encantaba y me encanta. No sé, se ve que es entre los 10 y los 20 kilómetros que es cuando más disfruto corriendo. Aunque en la maratón de Barcelona disfruté los 42.195 kilómetros. De recorrido haré el que vengo haciendo habitualmente y así no me como la cabeza.

Día: 93
Distancia recorrida: 8 Km.
Distancia acumulada: 558.3 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.


sábado, 10 de octubre de 2015

Día 90... 35 Kilómetros.

Nonagésimo día de entrenamiento. Hoy sí, hoy lo he conseguido; no me he quedado ni a cuatro ni a tres. Hoy realmente sí que estoy satisfecho. Tenía muchas dudas, llevaba varios días con la cabeza puesta en el día de hoy; pero le he echado un par de narices, he tenido la cabeza bien centrada, y sobretodo creo que he sabido mantener el ritmo sin tener ningún tipo de prisa; cuando son distancias tan largas no hay que tener prisa por acabar el entrenamiento. Aunque no sé si tiene algo que ver la cena que me metí ayer entre pecho y espalda. Como hoy tenía que correr una distancia importante, que mejor que meterme unas buenas reservas de hidratos de carbono, así que anoche decidí hacerme un buen plato de spagettis con espinacas y gambitas, y todo eso salteado con un ajo. Pues no sé si ha sido por la cena, por las zapatillas nuevas, o por llevar una mentalidad positiva, pero lo he conseguido. Realmente da igual, pero lo que importa es que lo he conseguido; y cuando se consigue un objetivo, da igual los motivos... es lo mismo que cuando no se consigue, que se intentan dar excusas. Hay que asumir, digerir y aprender de los errores que se han cometido; y si hoy no se consigue mañana se conseguirá, porque después de llevar catorce semanas de entrenamiento puedo hacer todo esto y mucho más (como se nota el haber logrado un objetivo... sólo hay que comparar esta entrada con la de hace cuatro semanas).

Antes de seguir con la entrada de hoy he de decir que hoy ya es domingo, empecé a escribir la entrada anoche y como me quedé dormido sigo hoy. Hecho este inciso puedo seguir explicando mi gran vivencia. Parece como si no hubiese corrido antes esta distancia; no sé como explicar las sensaciones; pero es que claro, después de dos tiradas largas quedarme a las puertas, y ayer conseguirlo pues hace mucho; y más cuando paso por los puntos kilométricos en los que me he quedado y veo que paso bien y no echo polvo como días atrás; eso sólo quiere decir una cosa, que estoy haciendo bien mi entrenamiento.

Ayer para dar un golpe de efecto y subir mi moral decidí afrontar mis miedos y me fui al delta del Llobregat, que lo tenía atravesado desde la última vez que estuve por allí corriendo, calor, mosquillas, comida de cabeza... Pues eso, que mejor que para dar un cambio radical a la motivación y al entrenamiento, lo mejor es afrontar el problema de cara, vamos echarle huevos (con perdón pero hablando mal y claro).

Cuando me desperté no es que tuviese el estómago muy fino, después del platazo de pasta que me metí el viernes por la noche aún estaba ahí presente, aún así decidí desayunar y por suerte me sentó bien. Y a la hora de empezar a correr no noté ninguna molestia, todo lo contrario me notaba bastante bien, corriendo a un ritmo suave y viendo pasar tranquilamente los kilómetros; y hasta la zona industrial no se me hizo pesada, cuando normalmente a la hora de comenzar ese trozo se me hace un poco pesadillo. También a la que notaba que aceleraba el ritmo yo mismo me frenaba y me decía que tranquilo, ya llegaría, que no había prisa. Cuando me quise dar cuenta ya estaba por la ribera del Llobregat, que suerte que llevaba las gafas de sol, porque me estaba dando todo el sol de cara. Yo no sé que tiene ese camino, pero casi todas las veces que voy por allí corriendo a la que llego a un punto en concreto me vienen unas ganas locas de orinar. Por suerte en ese mismo punto hay una zona frondosa de cañas y por ahí puedo meterme tranquilamente a cambiar el agua al canario. Cuando dejo ya el río, atravieso unos huertos de alcachofas para ya encarar el camino que va rodeando las pistas de aterrizaje y despegue del aeropuerto del Prat; que ya digo que es una pasada que un avión te pase a pocos metros justo por encima tuyo porque da la casualiad que en el momento de pasar por la trayectoria del avión cuando está a punto de tomar tierra; y lo más alucinante era que hacía un poco de viento y el avión que pasó justo por encima mio no tomó tierra recto, sinó que iba un poco ladeado (para que luego digan que los de Ryanair son malos). Casualidades de la vida, a la vuelta me volvió a pasar otro avión por encima (ya es raro) y más raro aún que volviese a ser otro avión de Ryanair. Esta vez a la vuelta tenía la mentalidad bien positiva, dándome ánimos a mi mismo y no se me hizo excesivamente pesado; quizás a partir de los 25-30 kilómetros notaba un poco de carga en las piernas, pero lo pude llevar bien. Aunque es curioso, como se puede estar bien y de repente notar un bajón tremendo. En un principio no noté los efectos del "muro" de los 30 kilómetros, pero sí que lo noté a los 33 kilómetros. Me encontraba bien, animado, con las piernas cargadas pero podía seguir. Pero supongo que sería el atravesar la zona industrial y el sol que me hicieron pegar un bajón y los dos últimos kilómetros me costaron un poquillo hacerlos, por no decir bastante; y más aún cuando en el tramo de Rambla Marina parecía que no se acababa nunca. Por suerte conseguí encarar avenida Carrilet y hacer el último kilómetro con toda la fuerza de voluntad del mundo. Eso sí en cuanto acabé me pegué un buen rato sentado en un banco al lado de casa antes de ponerme a hacer los estiramientos porque no me podía ni mover.

Como tuve la tarde entretenida me puse a escribir la entrada por la noche después de cenar mientras tenía los pies en el masajeador de pies; y después del masaje de pies mi mujer me hizo un masaje en las piernas; y ahí ya fue cuando perdí el conocimiento jejeje. Vamos que me quedé frito y no pude seguir con la entrada. Así que la estoy acabando ahora.

Mañana me tocaba hacer 11 kilómetros, pero los va a hacer quien yo sé. Tal y como dije en entradas anteriores, los días que tenga que hacer tiradas largas me tomo domingo y lunes de descanso; que el cuerpo también necesita un buen descanso para rendir mejor... además que me lo he ganado. Así que ya hasta el martes no hay entrada.

Día: 90
Distancia recorrida: 35 Km.
Distancia acumulada: 550.3 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.

viernes, 9 de octubre de 2015

Día 89... 5 Kilómetros.

Octogésimo noveno día de entrenamiento. Lo de levantarme ayer nada más sonar la alarma fue un espejismo, porque esta mañana me ha vuelto a costar una burrada salir de la cama. Bueno, costar lo que se dice costar en un principio no ha costado; porque me ha sonado la alarma, me he despertado y hasta he ido al baño, pero claro, al sonarme la alarma tan pronto y queriendo venir al trabajo corriendo pues como que podía descansar un poco más. Así que me he metido de nuevo en la cama a jugar un poco con el móvil. ¿Qué ha pasado? Pues que anoche me fui reventadísimo a la cama, y a la que esta mañana estaba jugando con el móvil los ojos se me iban cerrando. Entonces ha sido cuando me he dicho que descansaba un poco, y eso ha sido mi gran error, que luego no había manera de salir de la cama; y hasta las 7 pasadas no he salido de la cama, con lo que me ponía a correr a las 7:30 de la mañana. Y eso se ha notado una burrada en la calle, ya que toda la gente empieza a salir de sus casas para irse a trabajar y hay bastante tráfico. Vamos que hasta que no he salido de Hospitalet no me he empezado a encontrar bien debido a la masificación de gente. Claro, calles medio estrechas y con gente, no queda otra que ponerse a esquivar.

Otra cosa es que también me hubiese gustado salir como media hora antes, para así llegar tranquilamente al trabajo, hacer los estiramientos con calma y poderme lavar un poco sin prisa alguna. Pero hoy hasta las 8 no he llegado, que es la hora de entrar; por suerte en mi oficina nadie es puntual los viernes y hasta las 8:30 no suele llegar la gente. Pero ya me ha retrasado todo un poco hoy, porque también al tener bastante faena por unas cosas que había que entregar he tenido que ir con la prisa después de correr. Y yo, que después de correr me gusta ir con la calma y la tranquilidad, pues no ha podido ser así. Aún suerte que en el tiempo que he estado estirando y aseándome no ha venido nadie.

Centrándome en el entrenamiento, no sabía como reaccionaría hoy después de haber corrido ayer los 13 kilómetros. Ahora mismo noto las piernas un pelín cargadas, pero eso es lo más normal del mundo; a ver mañana que tal voy y si no muero en el intento jeje. Lo que tenía hoy más que claro era que no me iba a esforzar en hacer los 5 kilómetros y que me lo iba a tomar con toda la calma del mundo; vamos, al "trote cochinero" para así no esforzarme mucho y mañana poder rendir como toca, como un jabato que soy, como ese runner que lo va a dar todo. Eso sí, lo que sigo llevando fatal son los semáforos, que me ralentizan mucho el ritmo. Es que, desde plaza España, casi todo el tramo de Gran Vía que he hecho, a cada cruce el semáforo en rojo. Y como he dicho antes, esta ciudad se suele despertar a las 7:30 pues no he podido pasar ningún paso de peatones así de estrangis. Y eso rompe bastante el ritmo, ya se vaya suave como fuerte. Pero prefiero mil veces esto a no estar dando vueltas al parque, como hice el martes, que menudo agobio dar diez vueltas al parque. Aún no me creo cuando me aficionaba a esto (cuando me estaba preparando para mi primera media maratón) darle 15 o 17 vueltas al parque para hacer los respectivos 15 ó 17 kilómetros. Ahora sería incapaz, para comenzar que a las 9 vueltas ya perdería la cuenta; porque voy con la cabeza en otro sitio y no cuento las vueltas; y luego la monotonía de pasar tantas veces por el mismo sitio. Bueno antes podía correr tranquilamente 10 kilómetros en una cinta y ahora no las quiero ver ni en pintura, se corre mucho mejor dándome el aire que no de cara a una pared o viendo a los cuatro ciclados de turno queriéndose hacer los machitos intentando levantar un montón de peso y luego mirándose al espejo como si les hubiese crecido el músculo. Pero bueno, cuando uno empieza a correr experimenta con todo esto y hasta que no encuentra su "armonía" o su bienestar no para. Es como el que tiene en mente hacer en algún momento de su vida la maratón, la acabará haciendo.

Mañana día clave importantísimo. Una prueba de fuego para saber si llevo bien el entrenamiento o las pasaré canutas. En un principio me voy a mover por un terreno llano, con un buen calzado e intentaré llevar un ritmo lo más suave posible para que no me afecte y pueda hacerlo todo. Hace dos semanas conseguí hacer cuatro kilómetros más que hace cuatro semanas. Mañana, en cuanto pase de los 30 tendré que evitar que se me forme el muro. Así que no me quedará otra que ponerme buena música y llevar una mentalidad positiva; y sobretodo, lo más importante, no tenenr ninguna prisa en acabar. Eso ya lo contaré no sé si mañana, el domingo o el lunes (el que avisa no es traidor jeje).

Día: 89
Distancia recorrida: 5 Km.
Distancia acumulada: 515.3 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.


jueves, 8 de octubre de 2015

Día 88... 13 Kilómetros.

Octogésimo octavo día de entrenamiento. Uff que semana más loca que llevo, el lunes voy por la tarde a correr, el martes me cuesta un montón levantarme, ayer me quedé dormido y no pude salir a correr por la tarde. Suerte que hoy era mi día de descanso y lo he cambiado con el día de ayer. Al no salir a correr ayer, me lo tomé de descanso y hoy he hecho los 13 kilómetros. Pero igualmente una semana de mucho sueño; de irme a dormir muy pronto y costarme mil demonios levantarme. Y ayer me fui a la cama a eso de las 12 de la noche, y esta mañana en cuanto ha sonado la alarma he pegado un bote de la cama y a las 5:50 ya estaba en la calle dispuesto a hacer mi recorrido habitual de los 13 kilómetros recorriendo los barrios del Centro, Can Serra, Sant Josep y Santa Eulalia de Hospitalet.

Anoche al ver la hora que era y que aún no me había ido a la cama, me lo dije para mi, que cuanto más tarde me fuese a la cama, menos me costaría levantarme. Es que es curioso el cuerpo humano; cuanto más se duerme, más sueño se tiene luego. En cambio cuanto menos duermo, luego me levanto perfectamente; aunque luego esté que ni me aguanto de pie... pero me levanto perfectamente. Con el tema del sueño me pasó ayer, que cuando me quise dar cuenta ya era demasiado tarde para salir a correr los 13 kilómetros (no he de salir más de fiesta, que luego lo que cuesta volver a coger el ritmo bueno de sueño). Luego decidí que iría por la tarde a correr, pero entre que se puso a llover y que tenía reunión con los que hago teatro, pues como que no tenía ganas de ponerme a correr a las 9 de la noche. Así que como hoy me tocaba descanso, preferí descansar ayer y hoy darlo todo; que espero que no me pase factura para el sábado.

Hoy me ha pasado como casi todos los días, que al principio me cuesta encontrar el buen ritmo, pero a la que lo encuentro ya puedo ponerme a hacer kilómetros; aunque me he de ir con mucho ojo, porque muchas veces, sin darme cuenta, empiezo a subir el ritmo y cuando me doy cuenta llevo un ritmo fuerte, y esto es lo que creo que me ha pasado factura en las dos veces que he tenido que hacer tiradas largas. He de conseguir llevar un ritmo más tranquilo y constante; y sobretodo no tener tanta prisa por acabar; cuando acabe pues acabé. Me da igual tardar más o menos, lo importante es acabar. Eso entrar por segunda vez en el estadio de Anoeta alzando los brazos y poder decir que lo he hecho.

Realmente no es que tenga que contar muchas más cosas hoy, tampoco es que tenga muchas ideas para escribir. Bueno, que a veces la mente hace malas pasadas. En parte tengo ganas que llegue el sábado para poder por fin superarme y acabar el entrenamiento; pero hay otra parte de mi que hace que me ralle un poco; y es ese pensamiento el que me tengo que quitar de la cabeza, porque yo sé que puedo, lo he hecho una vez, y ahora lo volveré a conseguir. Además hace dos semanas sólo me quedé a 3 Km. que no son 10 kilómetros los que me faltaron, sino tres kilómetros y ya no quise hacerlos porque no tenía ganas, y tanto parar en los semáforos me rompió el ritmo totalmente. Así que el sábado voy a por todas, y para demostrar que no me importa me iré al delta del Llobregat, para así quitarme esa espinita de la última vez que no tengo muy buen recuerdo. Pero, claro, todo es cabeza y estar bien preparado, así que de malos rollos y ralladas nada de nada.

Mañana, viernes ya, y como todos los viernes iré a trabajar corriendo para así matar dos pájaros de un tiro y ya me quito el entrenamiento de encima.

Día: 88
Distancia recorrida: 13 Km.
Distancia acumulada: 510.3 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.

martes, 6 de octubre de 2015

Días 85 y 86... Series 6x800 y 10 Km.

Octogésimo quinto y octogésimo sexto día de entrenamiento.  Debido a que corrí ayer cuando plegué de trabajar, y esta mañana he vuelto a salir a correr; esta vez he decidido hacer en una sola entrada los dos días de entrenamiento y así no voy tan de culo escribiendo, y además realmente sin saber que decir exactamente. He de decir que esta vez también estoy como un poco más pasota con el tema del blog; vamos que para empezar los días que no corro ya ni escribo, y los sábados, al ser fin de semana, cuando acabo de correr me olvido de todo y me pongo a disfrutar del fin de semana, y hasta el día siguiente o más tarde aún no escribo la etrada. Eso no quiere decir que no salga a correr ni que no le eche ganas, y tanto que le echo ganas y cada vez estoy más entusiasmado en que llegue ese día y poder decir que he corrido ya dos maratones.

Lo que no llevo tan bien, de nuevo, es el despertarme cuando me tengo que despertar. Yo creía que era algo que había superado y ya no me iba a costar nada despertarme, pero fue salir el sábado con mis compañeros de trabajo y otra vez se ha descarajotado todo. Ayer, ese fue el motivo por el que al final salí a correr después de trabajar. Me sonó la alarma, y me dije "ahora me levanto"... y ese ahora me levanto eran ya casi las 7:30; así que evidentemente dejé para la tarde hacer las series. Y eso que el domingo antes de las 10 de la noche ya estaba metido en la cama. Y esta mañana pues también me ha costado lo suyo salir de la cama, vamos que desde que me ha sonado la alarma hasta que me he echado a correr han pasado 50 minutos; también he de decir que en ese espacio de tiempo, media hora ha sido perreando en la cama. Y mañana que es miércoles y he de hacer 13 kilómetros ya puedo ir espabilándome si no quiero acabar corriendo a las 19:30 o 20:00, con un tráfico tremendo y teniéndome que parar en casi todos los semáforos. Haré un esfuerzo.

Ya no me acordaba que era hacer unas series más o menos largas; porque una cosa es hacer series de 200 o 400 metros que aún se puede ir bien fuerte, pero a partir de los 800 ya hay que comenzar a saber dosificarse para saber llevar un buen ritmo. Eso sí, ayer en cuanto acabé las series estaba bastante cansado, hasta el punto de llegar a dudar si estaría recuperado para correr esta mañana, por suerte me he podido recuperar a tiempo. A ver que en lo global es poca distancia, pero pegarse esos seis tutes con poco tiempo para descansar entre serie y serie, pues resulta agotador. Tenía que descansar entre serie y serie 3 minutos, y yo, la verdad no se si descansé más o menos, ya que al hacer series de 800 en el circuito de 1 kilómetro, pues hacía mi serie, y luego hacía los 200 metros restantes del circuito (dar vueltas al parque de al lado de casa) caminando tranquilo pero sin pararme. Cuando llegaba al punto de partida otra vez a arrancar; y así seis veces más una primera vuelta de 1 Km. al trote para hacer el calentamiento. Siempre lo digo, antes de las series hay que calentar para no ponerse tan de golpe a correr fuerte. Pues eso, que para variar acabé las series con ganas de no hacer nada más. Con razón y con motivo anoche cai tan pronto en la cama; creía que no tenía sueño, pero a la que me senté en el sofá a ver la tele no tardé ni diez minutos en caer de sueño, jeje.

Tal y como he dicho, de la manera que acabé ayer creía que hoy no iba a estar en condiciones para hacer 10 kilómetros. Pues en contra de todo pronóstico he respondido. También he de decir que el primer kilómetro me ha costado hacerlo; y los cinco primeros kilómetros se me han hecho muy pesados. Como no tenía ganas de ir hasta la quinta puñeta y volver he decidido dar vueltas al parque, y encima, como soy un masoca, he escogido el circuito corto, vamos a repetir de nuevo lo que hice ayer, para así poder ir combatiendo la monotonía. Sólo que en este caso he hecho una pequeña variación para que no fuese tan monótono. Los cinco primeros kilómetros (o las cinco primeras vueltas) hacerlas en sentido contrario, por variar algo; y los otros cinco kilómetros dando la vuelta en el sentido que lo he estado haciendo siempre. Y aunque parezca mentira, se me ha hecho mucho más pesado el tramo inicial. De piernas y resistencia iba muy bien, pero no sé por qué pero hasta que no he cambiado el sentido no he empezado a estar a gusto. Sólo espero que cuando sea la maratón de San Sebastián, no tenga estas sensaciones. A veces pienso, si me agobio llevando solamente cuatro o cinco kilómetros, ¿qué va a pasar cuando tenga que correr 42? Pues nada, porque el ambiente cambia totalmente. El calor del público, ir corriendo rodeado de gente, correr por un sitio totalmente nuevo para mi... todo esto genera una motivación extra en mi cuerpo; además que cada 5 kilómetros hay avituallamiento. Con lo que lo conseguiré.

Mañana espero no dormirme y podereme levantar bien, porque me toca hacer 13 kilómetros. No sé porqué, pero los miércoles me encanta. Supongo que correr más de 10 kilómetros ya motiva. Para no romperme la cabeza iré por el mismo recorrido que fui los otros dos miércoles. Si mañana me canso ya me buscaré otro recorrido, pero de momento me gusta.

Día: 85
Distancia recorrida: 4.8 Km.
Distancia acumulada: 487.3 Km.
Día: 86
Distancia recorrida: 10 Km.
Distancia acumulada: 497.3 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.

domingo, 4 de octubre de 2015

Día 83... 16 Kilómetros.

Octogésimo tercer día de entrenamiento. Antes que me olvide, la semana pasada me olvidé hacer un comentario con respecto a los runners que me encontré por la zona alta de Barcelona, vamos la zona de pasta, la zona en la que ni currando tres vidas seguidas conseguiré vivir. Bueno, pues los runners de aquella zona tienen que estar a la última con todas las tecnologías, que si podómetro, pulsómetro, brazalete, ipad, movil, y los mil trescientos accesorios mecánicos más. Vamos, que además de eso se le añaden las ropas fosforitas. Total que estos runners cargados de pasta acaban pareciendose a Robocop vestido de fosforito.

Bueno, hecho este inciso voy a centrarme en el entrenamiento de ayer, que para variar no tenía muchas ganas de escribir la entrada y la estoy escribiendo ahora. Y lo que se dice hoy no es que tenga tampoco muchas de escribir en la etrada; así que creo que hoy será una entrada corta. Para comenzar, como sólo tenía que hacer 16 kilómetros me permití el lujo de poder perrear un poquito más de la cuenta en la cama. Así que me fui a correr a eso de las 8 de la mañana con la gran duda de si iba a ser un entrenamiento en seco o en mojado o mixto; con lo que me costaría hacer una buena elección de neumáticos... ay no! que no estoy con temas de motor. Después de la gran tormenta que cayo el sábado a las 4:30 de la madrugada, cuando salí a correr el tiempo aún estaba un poco inestable, vamos, que hasta cuando empecé a correr aún tronaba, con lo que empecé a dudar si me ponía a correr o no, pero que leche, era sábado el día que más kilómetros tenía que hacer, y lo que digo siempre que si en San Sebastián llueve nadie va a cancelar la maratón. Al final me puse a correr y a verlas venir, por si acaso me puse el cortavientos en caso de posible lluvia, aunque hubo momentos en que notaba que me sobraba un poquillo. Pero en el tramo en el que me cogió la lluvia (sólo 500 metros, vamos una nube escarriada) no lo eché de menos.

Ayer, al contrario del viernes u otros días, me costó bastante encontrarme cómodo en el entrenamiento. Vamos, que hasta prácticamente la mitad del entrenamiento no empecé a encontrarme a gusto, como que me costaba correr, algo así como llevar unos pesos en las piernas, y ya estaba comenzando a rayarme un poco de porqué me estaba costando tanto; pero sin venir a cuento más o menos a la altura del campo de fútbol del Hospi me empecé a encontrar de maravilla y entonces fue cuando pude disfrutar del entrenamiento, me lo pasé enormemente bien además de disfrutar al máximo de mis zapatillas. Y a partir de ahí pude subir toda la Rambla Just Oliveras perfectamente, dar una vuelta por el parque de Can Buxeres, y conseguir hacer el tramo de avenida Can Serra (ayer me volví a meter por esa gran subida). Y ni la lluvia me molestaba, también como viene siendo habitual en mi cuando llueve casi ni me entero que está lloviendo; sólo que he de ir con más cuidado a la hora de ver por donde piso, y más con las zapatillas nuevas, que dependiendo que tipo de suelo sea resbala más o menos. Por lo demás, pues un entrenamiento normal y corriente, además que 16 kilómetros para mi no empieza a ser nada, tal y como dije en alguna entrada anterior. Así que poco más puedo explicar de este entrenamiento. También hoy, no es que ande muy fino, anoche me iba a la cama a las 5:30 de la mañana, pero no por insomnio, sino porque estuve anoche disfrutando con mis compañeros de trabajo. Vamos que me fui de fiesta. Eso sí, para mañana estaré al 100% para seguir con mi preparación para la gran maratón. Conseguir acabar mi segunda maratón y poder decir que soy corredor de maratones.

Mañana vuelvo a las series, y nada menos que he de hacer seis series de ochocientos metros, vamos que más o menos será como hacer tres series de 1.500 metros. Pero en fin, mañana ya se verá y ahora me toca ya descansar.

Día: 83
Distancia recorrida: 16 Km.
Distancia acumulada: 482.5 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.

viernes, 2 de octubre de 2015

Día 82... 5 Kilómetros.

Octogésimo segundo día de entrenamiento. Otra semana que ya casi se acaba; cuando menos cuenta me de ya estaré subido en el tren con destino a la capital de Guipúzkoa. Tengo unas ganas tremendas de estar ya por allí. Hace once años que no voy por allí, así que iba siendo hora que me tocase volver por las tierras euskaldunes de las que me enamoré hace ya unos dieciséis años.

Realmente no es que tenga que contar mucha cosa. Hoy al tener que venir al trabajo corriendo y ser sólo cinco kilómetros lo que tenía que hacer, me he podido permitir el lujo de perrear un poquillo en la cama, vamos con decir que he salido a correr a las 7:00. Sino qué voy a hacer tanto rato en el trabajo, si no me pagan las horas de más. Con lo que no me ha hecho falta hacer un esfuerzo de esos sobrehumanos para salir de la cama. Aunque últimamente no me cuesta mucho salir de la cama, y eso que llevo una temporada que hasta me he adelantado la alarma del reloj 20 minutos. Yo creo que es por eso por lo que no me cuesta tanto levantarme; además me ocurre una cosa muy extraña más o menos ya sé cuando va a sonarme la alarma, y eso que ni miro la hora. Supongo que será el reloj este que llevamos en el cuerpo. Pero tengo ganas de que al menos uno o dos días poderme estar en la cama un buen rato; eso me encanta; pero parece que tengo un petardo en el trasero y no me se estar quieto.

Hablando de la noche, esta noche he tenido un sueño relacionado con la maratón donostiarra; no sé si ha tenido algo que ver que como anoche tenía frío y no tenía ganas de sacar el pijama largo del armario me puse una camiseta de correr de manga larga. Pues bien soñaba que estaba en los kilómetros finales de la maratón, o por la mitad (era algo confuso), de repente me veo como dibujando en el mapa el recorrido como a cámara rápida excepto el tramo final, que vuelvo a la "realidad" y vuelvo a estar corriendo, aunque tengo la sensación de que me he comido algún trozo de recorrido; y claro evidentemente también ha habido el momento de no saber por donde iba y me desorientaba, porque no había casi nadie corriendo. Cuando por fin consigo entrar en el estadio de Anoeta resulta que estoy como casi pegado a un muro, totalmente cubierto y lo más gracioso de todo, la pista de atletismo hacía subidas y bajadas. En fin unas paranoias más raras que hace mi subconsciente. Así hasta que me ha sonado la alarma y ya me he espabilado un poco.

Entre una cosa y otra ya me han dado las 7:00 y me he ido a trabajar teniendo una muy buena sensación cuando he empezado a correr, con lo que el entrenamiento de hoy iba a ser muy placentero; y así ha sido. Cuando menos cuenta me he querido dar ya estaba en plaza España; y luego he pensado que llegar hasta la calle Aribau me costaría; pues no se si es que han quitado calles o han acortado las distancias entre calles, pero en un abrir y cerrar de ojos ya estaba en la calle Muntaner (justo la calle de antes de Aribau que es por la calle que tenía que subir). Vamos, que cuando me he querido dar cuenta ya estaba en el trabajo. Si no sé si lo decía ayer o cuando. Pero a medida que voy cogiendo fondo hacer 5 o 10 kilómetros los hago como si nada.

Mañana me toca una distancia de las que me gustan, 16 kilómetros. Esta vez no me iré a la carretera de les Aigües, más que nada para no aborrecerla, así que me he ideado un recorrido entre Hospitalet y Cornellá, aunque tenga que pasar por la zona industrial tan aburrida; pero es que si no lo hago así no tengo ideas de por donde ir, y así varío el recorrido. Pero eso ya lo contaré mañana.

Día: 82
Distancia recorrida: 5 Km.
Distancia acumulada: 466.5 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.

jueves, 1 de octubre de 2015

Día 80... 13 Kilómetros.

Octogésimo día de entrenamiento. Hoy voy a empezar de la misma manera que empecé la entrada del pasado 14 de enero. Son ochenta días son, ochenta nada más, para dar la vuelta al mundo. Recuerdos de la infancia en aquellas series de dibujos de los ochenta. Todo está relacionado con el ochenta. Bueno dejo ya estas coñas y me centro principalmente en el entrenamiento de ayer, porque para variar ayer dejé estar la entrada del blog; aunque también he de decir que tuve un día algo movidito, y entre la falta de ganas de escribir y la falta de tiempo, y que tampoco estaba muy inspirado que digamos, pues lo dejé estar. Así que aprovecho ahora para escribir la entrada del día. Si ayer mientras iba corriendo hasta se me pasó por la cabeza no escribir más entradas, con lo que uno ya se puede imaginar como tenía la cabeza de loca. Pero bueno, eso no ha sucedido, por suerte ayer al final del día se solucionaron todas las movidas que me vinieron durante el día.

Bueno, voy a dedicarme única y exclusivamente al entrenamiento, que no tengo ganas de hablar de mi vida personal; ya que este blog lo estoy haciendo basándome en mis experiencias como runner y lo que me puede afectar; y no he de escribir cosas que no tengan nada que ver y que no estén vinculadas con el running.

Después de esta aclaración vamos al lío. Ayer tenía que correr 13 kilómetros; con lo que no me podía quedar dormido. Y esta vez sí, lo conseguí, por fin, me ha llevado más de dos meses de entrenamiento, mejor dicho, me ha costado casi tres meses poderme despertar un día bien y salir a correr antes de las 6:00... bueno eran las 5:55, pero bueno ha sido antes de las 6:00 que es lo que importaba realmente. Y eso que por la noche me acabé durmiendo bastante tarde, pero como ya no me como la cabeza de si duermo o no, porque sé que aunque haya dormido sólo tres horas luego rindo igualmente. Al menos espero que cuando esté en San Sebastián duerma un poco, porque sino en cuanto acabe la maratón, en el viaje de vuelta me voy a qudar frito, jeje. Los días de 13 kilómetros, que van a ser unos cuantos miércoles, me encantan. Bueno, realmente hasta los 15 o 20 Km. me gusta mucho, son distancias que las disfruto realmente y aún puedo llevar un buen ritmo. En cambio cuando son distancias largas sí que las disfruto, pero tengo que irme con mucho cuidado con el ritmo a llevar para evitar que las piernas digan basta; aunque con un poco más de entreno esto se soluciona. Me gustaría mucho poder llevar un buen ritmo, pero es muy difícil, así que me lo tendré que tomar con calma y lo que dure pues duraré (me refiero a lo que tardaré en hacer la maratón).

Ayer me levanté un poco con el miedo de la lluvia, a ver, a mi me da igual correr con lluvia que sin lluvia, pero con estas distancias ya importantes no quiero arriesgarme a correr con lluvia por miedo a acatarrarme. Pero yo soy de los que con lluvia ni le hago caso a ésta, me pongo a correr a mi aire ignorando la lluvia; y cuando acabo es cuando me doy cuenta que estoy chorreando. También soy consciente que en Donosti la probabilidad que llueva el día de la maratón es bastante alta, pero más que lluvia yo diría txirimiri. Así que el cortavientos será fundamental. Volviendo al entrenamiento, por suerte ayer cuando salí a correr no llovía, pero sí que hubo algún tramo que me dio el viento de cara, y encima en los tramos en los que la acera era bastante ancha y no tenía ningún punto donde protegerme un poco del viento; con lo que me lo tuve que comer con patatas. Por lo demás no tengo mucho más que contar, ya que hice el mismo recorrido que la semana pasada de 13 kilómetros, y lo sigo diciendo, el tramo de avenida Vilanova del barrio del Gornal se me sigue haciendo pesadísimo, ya sea al principio como a mitad de entrenamiento; pero es curioso, sólo se me hace pesado si voy en sentido hacia la Gran Vía, si lo hago al revés se me hace más rápido (yo creo que dependiendo del sentido que lleve la calle se ensancha o se estrecha, jeje). También va pareciendo que voy comenzando a tener que correr con manga larga, porque las noches ya comienzan a ser bastante frescas y para comenzar a correr con manga corta, pues paso un pelín de frío. También ayer hice el entrenamiento con las zapatillas nuevas; creo que ya las voy a utilizar para todos los entrenamientos. A ver que tal van el sábado que he de hacer 16 Km. Yo creo que ya las he amoldado bien; es que se nota muchísimo la amortiguación de las zapatillas nuevas con las viejas. Yo creía que no, pero se nota y mucho. Eso sí las zapatillas viejas ahí las tendré para darle trotes y también me las llevaré a San Sebastián como calzado de repuesto.

Mañana toca hacer poca distancia, 5 kilómetros, así que si no hay ningún impedimento, haré como casi todos los viernes, ir al trabajo corriendo. Que ahora cuando hago 5 kilómetros, me sabe a poco. Que ganas tenía de decir esto de que 5 Km. me saben a poco, porque aún me acuerdo aquel 13 de Julio lo mal que lo llegué a pasar, que al tercer kilómetro ya iba que no podía más. Por eso digo, que quien le ponga dedicación consigue los objetivos que se proponga. El cuerpo humano es una máquina que cuando se le da un buen rodaje funciona a las mil perfecciones; lo malo viene con los excesos o no darle el correcto uso. Así que practicar deporte sí, pero con dos dedos de frente y sin forzarse... vamos disfrutando.

Día: 80
Distancia recorrida: 13 Km.
Distancia acumulada: 461.5 Km.

Saludos y a dejarse llevar por las piernas.