Quincuagésimo día de entrenamiento. Parece ser que las semanas que tengo que hacer más kilómetros entre semana no me cuesta nada hacerlo, no sé si es porque me concentro al 100% o que; pero cuando tengo que hacer unos 5 o 7 kilómetros solamente, como que me confío y me canso más. En cambio si son semanas de 10 u 8 Km. los hago como si nada, como me ha pasado hoy que he hecho los 10 kilómetros que me tocaban como si nada. Y eso que he vuelto a tener una de esas noches locas mías en las que me daban las tantas para dormirme. Anoche tenía la cabeza puesta en que hoy me tocaba volver al trabajo y cuando parecía que me iba a quedar dormido me desvelé y hasta las 2 y pico no cai rendido. Eso sí, esta mañana por increíble que parezca me he levantado como si nada y a las 6:15 ya estaba saliendo a correr. Al contrario que en la Estación Linares-Baeza, que no podía salir a correr hasta que no amaneciese, porque al ir por campo el camino no estaba iluminado; en Hospitalet no hay problema por salir a correr aún sin haber amanecido, ya que el parque por el que voy a correr está iluminado, y aquí también amanece antes, a las 6:30-6:45 ya empieza a haber algo de luz.
Esta mañana estaba dudando si hacer un circuito urbano, que consiste en bajar por el barrio de Gornal hasta la Gran Vía, llegar hasta plaza España, y volver a casa por la carretera de la Bordeta; o por el contrario ponerme a dar vueltas por el parque. Al ser día laborable he preferido hacer el circuito del parque (el recorrido largo), porque sino me encuentro muchos semáforos y eso rompe el ritmo de mala manera, el parar, estar pegando los botecitos para no enfriarse, volver a arrancar, como que viene a ser bastante cansado. Así que sabiendo que es día laborable hay más movimiento de coches, con lo que por eso he decidido hacer cinco vueltas al circuito largo del parque (1,9 Km.) y media vuelta al circuito clásico de 1 Km. que es donde he ido a correr siempre.
Como he dicho antes, pese al cansancio del sábado, y el haber dormido poco esta noche he respondido muy bien al entrenamiento. Se me ha hecho un poco monótono, por eso de estar teniendo que dar vueltas, pero las piernas me han respondido perféctamente y me he sentido muy cómodo; vamos que después del tute del sábado ya cualquier distancia menor creo que la voy a ir haciendo como si nada; siempre y cuando no haya series, que eso sí que no lo soporto y me dejan petadísimo. Irán todo lo bien que sea, ayudarán para aumentar la resistencia, para mejorar la capacidad cardíaca y todo lo que uno quiera. Pero a mí no me gustan nada, porque luego voy todo el día atontado perdido debido al esfuerzo que he hecho. Yo que soy persona de ir a mi ritmo constante llevando una buena frecuencia cardíaca puedo llegar a hacer hasta una maratón. Pero yo y las series no hacemos buenas migas. Eso sí, las hago porque sé que luego me encuentro muchísimo mejor para correr (exceptuando la semana pasada con las dichositas series de 1500 metros).
Aunque realmente ya casi ni hay semanas de pocos o muchos kilómetros. Estoy rozando el ecuador de la preparación y la cosa se empieza a poner divertida. Es que es curioso, porque cuantos más kilómetros tengo que hacer, mejor me siento. El bienestar que me viene al cuerpo cuando finalizo un entrenamiento, porque sé que he rendido, haya ido más rápido o más despacio, pero lo he hecho. Como he dicho tantísimas veces ni me molesto en controlarme el tiempo para evitar caer en obsesiones de si he ido lento o rápido. Además esto también es una ventaja, porque así aprendo a saber dosificar mi propio ritmo sin tener que estar dependiendo de un reloj o de una liebre. Ya lo he dicho en otra ocasión, pero las liebres en las cursas a mi no me gustan (que conste que esto es una opinión mía, y estoy dando mi punto de vista, y todas las opiniones son respetables). Puede haber gente que le vaya de maravilla seguir una liebre para poder llevar un ritmo constante, bien porque se acelera y a mitad de carrera se desfonda, o bien por todo lo contrario. Así que si se enganchan a una liebre saben que van a llevar un ritmo constante. En cambio desde mi punto de vista, vengo a lo que hablo siempre; el running es un deporte individual, ya que si se corre con alguien hay que adaptarse uno a otro. Y lo bonito está en que cada uno sepa gestionar bien su ritmo. Y yo he intentado engancharme a alguna liebre o seguir el ritmo de otra persona, pero no aguanto mucho. Una vez quise seguir a unas liebres que llevaban un ritmo más fuerte que el mío y tuve que acabar dejando de seguirlas porque me desfondaba; y otras veces he intentado engancharme a alguien para seguir su ritmo y acabo dejándolos porque sé que puedo tirar más. Eso sí, si alguien quiere engancharse a mi ritmo yo encantado.
Mañana otro día de estos de distancia intermedia que veo que va a ser calcado a hoy. Con lo que me iré lo más seguro a hacer el circuito largo del parque, darle cuatro vueltas y luego en el circuito de siempre hacer 400 metros para acabar completando el entrenamiento.
Día: 50
Distancia recorrida: 10 Km.
Distancia acumulada: 251.7 Km.
Saludos y a dejarse llevar por las piernas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario